En la tercera semana de febrero, los precios de los mercados eléctricos europeos bajaron, alcanzando la mayoría promedios semanales inferiores a 110 €/MWh. Fueron varios los factores que favorecieron los descensos. Por un lado, la caída de precios del gas y CO2, así como el descenso de la demanda. Por otro lado, el aumento de la producción renovable. La fotovoltaica aumentó, registrando récords para un día de febrero en Alemania, Italia y Portugal. Además, la producción eólica aumentó en varios mercados