La planta, que cuenta con una capacidad desalinizadora de 100.000 m3/día, ha estado operativa desde principios de 2013 y utiliza la tecnología de ósmosis inversa. Abengoa ha sido la responsable del diseño, la tecnología y la construcción de la misma y cuenta, actualmente, con un contrato de operación y mantenimiento por veinticinco años.