El almacenamiento de energía en baterías se está convirtiendo en un componente esencial para equilibrar una red eléctrica cada vez más dependiente de fuentes renovables, así como para mitigar la volatilidad de los precios del mercado y reducir los vertidos de energía renovable. No obstante, para asegurar su rentabilidad a largo plazo, las empresas deben diversificar sus estrategias de generación de ingresos, explorando opciones como el arbitraje de precios y la hibridación con energías renovables