El incremento en el precio de la vivienda supone una buena noticia para el sector inmobiliario, uno de los más castigados por la crisis financiera. La predicción para este año se ha realizado a partir del hecho de que en 2015, el coste de las casas registró un incremento del 1,8% respecto el año anterior. A pesar del camino que sigue el sector, según los empresarios, todavía queda un largo camino para recorrer y alcanzar una estabilidad