Ahora que la pandemia está llegando a su fin, las empresas están reevaluando la utilidad y la necesidad de los viajes de negocios y la movilidad internacional. Con la reanudación de los viajes en Europa, la atención se centra más en la calidad que en la cantidad. Las organizaciones se decantan cada vez más por la contratación de talentos locales y no en el aumento de puestos internacionales. El trabajo internacional a distancia, en cambio, puede ofrecer una solución cuando hay escasez de talento.