La demanda eléctrica de Europa ha comenzado a recuperarse en los mercados en los que ha empezado el desconfinamiento. A esto se unió que en la primera semana de mayo la producción eólica se redujo en el continente, provocando un aumento de los precios, aunque continuaron por debajo de 30 €/MWh. El petróleo Brent también mostró signos de recuperación ante el inicio de la relajación de las medidas tomadas para frenar la COVID‑19. Por otra parte, el gas sigue en mínimos históricos