El Consejo de Ministros ha aprobado hoy, mediante Real Decreto-Ley, la segregación de Adif en dos entidades públicas empresariales diferenciadas, adscritas ambas al Ministerio de Fomento pero con personalidad jurídica y patrimonio propios: Adif y Adif Alta Velocidad, en razón de su respectiva actividad principal y las notables diferencias que presentan tanto desde el punto de vista técnico como económico y de financiación.