La ingesta de esteroides anabolizantes incrementa el riesgo un 50% en personas con predisposición genética.

El Dr. Juan Ruiz Alconero, médico cirujano experto en salud capilar y director de Capilae, clínica especializada en cirugía de trasplante del cabello,asegura que el consumo de anabolizantes eleva el riesgo de pérdida de pelo al incrementarse los niveles de testosterona.

 

La alopecia común o alopecia androgenética es la causa más frecuente de pérdida de cabello en el hombre. Se calcula que cerca del 30% de los hombres de 30 años la padecen y más de la mitad a partir de los 40. Las causas están en la dihidrotestosterona o DHT, una hormona que se produce a partir de la testosterona de manera natural.

 

“Aunque no hay un consenso y no se puede decir que la ingesta de anabolizantes per se provoque la caída, es lógico pensar que si se toman esteroides anabolizantes, cuya principal función es incrementar los niveles de testosterona y así mejorar la masa muscular y el rendimiento, los niveles de DHT se incrementan y por tanto su efecto sobre el folículo piloso”, explica el Dr. Ruiz Alconero que prosigue “dado que la genética en estas situaciones suele ser desconocida, sí es probable que con pacientes predispuestos se eleven los riesgos, al igual que se agrave en personas que ya sufren pérdida de cabello”.

 

La alopecia androgenética es un trastorno genético que se hereda pero que se puede activar por situaciones externas. Su mecanismo es provocado por receptores sensibles a la testosterona. Por eso, si se consumen productos que aumenten esta hormona, se aumentará el efecto de la pérdida de pelo. Incluso un 50% en el caso de los hombres con predisposición genética.

 

En el caso de los deportistas que no consumen anabolizantes, esté demostrado con estudios que el ejercicio que conlleva un aumento de la masa muscular de manera natural como el boxeo o la natación, puede llevar a aumentar los niveles basales de testosterona, incluso por encima de niveles normales, especialmente en mujeres.

 

“Es por tanto, asumible, que, aunque en menos medida que en la toma de esteroides, el ejercicio intenso, con carga muscular, puede aumentar los niveles de testosterona, elevar la DHT y, en personas predispuestas, provocar un aumento de la caída o iniciar el proceso”, señala el Dr. Ruiz Alconero.