Según el estudio Cigna Wellbeing Survey 360, el 45% de la población española admite que el trabajo es ahora más transaccional y que hay menos oportunidades de establecer vínculos con los compañeros, que es un factor fundamental para el bienestar emocional en el trabajo. Contar con una red de apoyo en el trabajo supone un potente reductor del estrés, un factor fidelizador y una oportunidad para mejorar la colaboración entre equipos y fomentar un estilo de vida más saludable