El efecto positivo que tienen la subida de temperaturas, la mayor cantidad de horas de luz y sol al día y el renacer de la naturaleza, convierten esta estación en la época del año en la que más protagonismo adquiere el amor. Su efecto provoca una etapa de transformación en la mayoría de personas que desencadena cambios en las parejas: aumentan las nuevas relaciones pero también las rupturas