El Villarreal igualó sin goles ante el RC Celta en Baláidos, en un partido en el que mereció llevarse la victoria por la gran cantidad de ocasiones –sobre todo en la segunda parte- y en el que se mostró muy seguro en defensa, por el gran trabajo colectivo de presión realizó el equipo de Marcelino, al que no cedió ni una ocasión al conjunto local en todo el encuentro.