La vinculación entre la impulsora de la reforma de la orden carmelita y la Casa de Alba se remonta a la segunda mitad del siglo XVI, cuando llegó a fundar 17 conventos gracias al apoyo y la ayuda económica de, entre otros, los entonces Duques de Alba. Las puertas de este emblemático edificio se abrirán al público el próximo 10 de mayo tras la restauración impulsada por el Ayuntamiento de Salamanca y la Fundación Casa de Alba