El confinamiento ha provocado que muchas personas pasaran mucho más tiempo en el domicilio y, en ese período, observaron las carencias del inmueble en situaciones así, por lo que, por temor a nuevas restricciones, se ha experimentado un ‘boom’ de reformas y, en paralelo a ello, un repunte en las ventas de muebles para procurar un ambiente más acogedor y confortable, sostiene Portobello Street