Después de un período de vacaciones, la vuelta a la rutina puede generar apatía, falta de concentración y estrés. La vuelta al trabajo, la preparación para el inicio de curso, las obligaciones antiguas y las que aparecen de nuevo "se convierten en una combinación de cargas que, mal gestionadas, pueden acabar por provocar dolores musculares que empeoren la situación", afirma Pablo de la Serna, fisioterapeuta y experto en terapia de calor