El Colegio de Biólogos de Catalunya exige al Ministerio de Sanidad la regulación de los biólogos como profesión sanitaria, como en otros países de Europa. El decano de los biólogos catalanes, Lluís Tort, denuncia que "la posición del Ministerio puede desembocar en situaciones de abandono e indefensión para los pacientes, ya que sin la necesaria regulación, los actos profesionales realizados por biólogos pueden quedar fuera de la cobertura de los seguros de responsabilidad de los hospitales"
En la sanidad catalana hay unos 2.500 biólogos, contratados como a titulados superiores en instituciones privadas y públicas, y que trabajan en el ámbito clínico pero donde no se les considera profesionales sanitarios. El decano del Colegio de Biólogos de Cataluña, Lluís Tort, exige al Ministerio “el reconocimiento de la totalidad de los biólogos sanitarios como profesionales sanitarios, cumpliendo las promesas pendientes que los diferentes equipos ministeriales han hecho los últimos años”.
El Ministerio de Sanidad había anunciado su regulación en 2019, pero el equipo dirigido por Carolina Darias se desdijo inicialmente de dar acceso a los más de 15.000 biólogos de toda España que desarrollan su labor en el ámbito de la salud. Una posición que han reconsiderado y ahora, se espera que retomen su compromiso sin más dilación.
Actualmente, son considerados profesionales sanitarios solo los que hayan obtenido el título de especialista en las especialidades de laboratorio de Análisis Clínicas, Microbiología y Parasitología, Bioquímica Clínica, Inmunología, Radiofarmacia y Radiofísica Hospitalaria, pero no en muchas otras donde los profesionales de la biología realizan actividades asistenciales, analíticas, docentes e investigadoras.
Para el decano de los biólogos catalanes, "sin los biólogos, el sistema sanitario se quedaría sin muchas especialidades", entre las que destaca dos grandes áreas como la Genética Clínica y la Reproducción Asistida, donde el 98% de los especialistas son biólogos. “En estas disciplinas, desde hace años reguladas en Europa, los biólogos deberían estar en situación de igualdad al resto de los profesionales (médicos, farmacéuticos, enfermeros, psicólogos) que sí que tienen reconocida su función sanitaria”, denuncia Tort.
La labor de los biólogos sanitarios es esencial para la sanidad y ha sido esencial en el esfuerzo multidisciplinario para controlar la expansión del coronavirus. El desarrollo de las vacunas, la realización de pruebas diagnósticas, la labor de los equipos de investigación y de los especialistas en virología, donde han estado en primera línea, es solo parte de un trabajo tan importante como poco reconocido, “ya que la su figura profesional continúa sin disfrutar en España de un reconocimiento legal específico”, denuncia Tort.
Imprescindibles en nuevas áreas Hoy en día, casi todas las especialidades médicas se secundan de una u otra forma en la genética y en la biología molecular para sus diagnósticos. Un ejemplo se ha vivido en esta pandemia, donde la secuenciación del virus ha servido para mejorar las técnicas de diagnóstico, indagar en posibles tratamientos, observar el comportamiento de los diferentes troncos y desarrollar vacunas en tiempos récord.
Otro ejemplo es el tratamiento del cáncer, donde es imprescindible diagnosticar los tipos tumorales con técnicas de biología molecular para optimizar los resultados. O en la reproducción humana, donde los biólogos son mayoritarios, y donde el control biológico tiene cada día más importancia a causa de los cambios en los hábitos de vida.
También se encuentran biólogos en Anatomía Patológica, Dietética y Nutrición, Bromatología o Enfermedades infecciosas. En sectores como la Salud Pública, hay especialistas en sanidad ambiental y seguridad alimentaria, que participan en el desarrollo de controles y protocolos para comedores de colegios, hostelería o restauración; en los análisis de aguas residuales para la detección del sars-cov-2 u otros patógenos o en los protocolos para la desinfección.
El Colegio de Biólogos de Catalunya (CBC) es una corporación de derecho público que establece el punto de encuentro de los profesionales de la Biología de adscripción obligatoria para ejercer la profesión. Pueden ser miembros todos los licenciados en biología, y aquellos titulados en grados oficiales que acrediten un tronco común sustancial con el grado de biología. El Colegio agrupa en estos momentos cerca de 2.500 profesionales.