"Esta técnica posibilita un duradero efecto de rejuvenecimiento y recuperación de la tersura de la piel afectada por el paso del tiempo", destaca Javier Rangel, director de la unidad médico-estética del Centro de Medicina Estética de la Dra. Shelum
El Centro de Medicina Estética de la Dra. Shelum, instituto de referencia que combina la medicina estética con la farmacología, ha hecho público hoy un análisis sobre los aspectos más importantes de los hilos tensores, uno de los tratamientos estéticos más populares en los últimos tiempos. Conocido por su rápido efecto lifting sin necesidad de cirugía, “esta técnica posibilita un duradero efecto de rejuvenecimiento y recuperación de la tersura de la piel afectada por el paso del tiempo”, destaca Javier Rangel, director de la unidad médico-estética del Centro de la Dra. Shelum. No obstante, la novedad del tratamiento provoca que todavía existan muchas dudas acerca de sus indicaciones y características entre sus potenciales usuarios.
DRA. SHELUM ANALIZA SIETE CUESTIONES SOBRE LOS HILOS TENSORES
Qué son y dónde se colocan
Los hilos tensores son unos filamentos que se colocan a nivel subdérmico con la finalidad de reposicionar los tejidos grasos faciales que con el paso del tiempo sufren una redistribución y para mejorar la flacidez cutánea por estimulación de colágeno en la dermis.
Efectos en el corto y medio plazo
Los hilos se colocan uno a uno, generalmente entrelazados en forma de malla, y sirven para inducir la producción de colágeno por medio de fibroblastos. Esto se consigue gracias a que el material del que están hechos los hilos, que pueden ser de polidioxanona (PDO), ácido poliláctico, de un copolímero de ácido poliláctico o de ácido glicólico, favorece esta producción natural de colágenos tipo I y III y de los fibroblastos alrededor suyo, consiguiendo así que la piel se redensifique y esté más elástica.
Se pueden usar tanto en la cara como en el cuerpo
Los hilos se pueden utilizar tanto para cara como para otras partes del cuerpo tales como el abdomen, brazos, piernas, glúteos e incluso cuello. Su uso está probado porque es el mismo que se utiliza para las suturas. Por tanto, se sabe cuál es la interacción que tiene con el organismo y el efecto que produce.
Intervención poco invasiva que se realiza en consulta ordinaria
La colocación de los filamentos se realiza a través de una intervención mínimamente invasiva, en consulta ordinaria y con anestesia tópica o local en el caso de pacientes con un techo de dolor bajo. Además, el material que se emplea en la elaboración de los hilos está completamente testado a nivel quirúrgico. Los hilos tensores son absorbidos por el cuerpo, tal como ocurre con las suturas de intervenciones quirúrgicas.
Posibles complicaciones y efectos secundarios
Los efectos secundarios y posibles complicaciones son mínimos. Pueden producir un pequeño proceso inflamatorio que se controla con medidas físicas locales, tales como la aplicación de packs fríos o en su caso, antiinflamatorios orales. En ocasiones produce hematomas, riesgo que se puede evitar parcialmente evitando los antiagregantes plaquetarios tipo Aspirina. No es necesario tomar tratamiento antibiótico preventivo si el tratamiento es realizado en un ambiente médico y por un profesional en el tema.
Convivencia con bótox y otros tratamientos de medicina estética
El bótox con fines estéticos solo puede ser utilizado en el tercio facial superior, mientras que los hilos pueden aplicarse en todo el rostro. Este condicionante, unido a los efectos y características de uno y otro, hacen que puedan ser considerados como complementarios. Por ejemplo, en caso de que busquemos levantar las cejas, se suele aplicar la toxina botulínica, y posteriormente colocar los hilos. Los hilos también pueden ser combinados con tratamientos de relleno o inductores de colágeno. Idealmente ambos tratamientos se aplicarán en sesiones distintas, si bien no es relevante cuál de ellos se realice primero.
El único tratamiento con el que los hilos tensores no pueden convivir es el relleno permanente. No se pueden colocar hilos tensores en una zona previamente tratada con producto no reabsorbible, como puedan ser las siliconas.
Duración del tratamiento
Mientras que el efecto tensor es inmediato, la producción de colágenos tiene lugar hasta la sexta semana tras la intervención. Así que los efectos definitivos del tratamiento, en todos casos muy naturales, pueden verse al cabo de unos dos meses. Este resultado permanecerá en la cara y cuerpo del paciente aproximadamente 18 meses, transcurridos los cuales el tratamiento podrá volver a repetirse.
SOBRE EL CENTRO DE MEDICINA ESTÉTICA DE LA DRA. SHELUM
El Centro de Medicina Estética de la Dra. Shelum tiene sus orígenes en Caracas, Venezuela, donde las hermanas María Silvia Ramírez y María Jesús Ramírez, farmacéuticas y expertas en medicina estética, inauguran su primera Clínica hace 13 años. A través de un equipo multidisciplinar de médicos, farmacéuticos, esteticistas acreditadas y nutricionistas se ofrecerá un servicio de atención único, que surge del punto de encuentro entre la medicina estética y el seguimiento fármaco-terapéutico personalizado. La Clínica de la Dra. Shelum es hoy un espacio destacado de la medicina estética en toda Venezuela, conocido por potenciar la belleza natural sin artificios y con los mínimos tratamientos invasivos. Dra. Shelum Esthetic Center está asistiendo actualmente a un proceso de internacionalización de la marca del que se deriva su apertura en Madrid.