Cuando las vacaciones son espectaculares es normal querer llevarse un souvenir como recuerdo de esos días de gozo y plenitud. El problema es que todos esos objetos de recuerdo terminan almacenados sin sentido y robando el preciado espacio que, ahora mismo, es un lujo. Dimensi-on, especialistas en arquitectura y diseño de interiores, señala qué souvenirs no hay que comprar en vacaciones