Los expertos prevén entre cinco y diez años para alcanzar la madurez real de los agentes autónomos. El 80% de los participantes considera clave la formación y el reskilling para implantar agentes con éxito
El entusiasmo por el potencial de los agentes de Inteligencia Artificial (IA) como motor de automatización y autonomía en procesos empresariales crece con fuerza, pero su implantación efectiva todavía se enfrenta a importantes retos técnicos, organizativos y culturales. Así lo reflejaron los más de 50 profesionales que participaron en la última sesión celebrada en el marco de AI Directors, el foro impulsado por AI-Network que reúne a líderes empresariales para compartir experiencias, casos de éxito y tendencias en IA.
La sesión comenzó con las ponencias de apertura de sus partners NFQ -especialistas en consultoría tecnológica y de negocio, impulsando la transformación digital con foco en talento, eficiencia y resultados tangibles, y con BIP Spain -consultora internacional de innovación y estrategia que lidera grandes proyectos de inteligencia artificial y adopción tecnológica en empresas de primer nivel- que ofrecieron su visión el presente y el futuro de los agentes de IA en la empresa.
Ángel Galán, de BIP Spain, centró su intervención en desmitificar la percepción actual que rodea a los agentes, advirtiendo que en el contexto del hype que vive la IA es fácil confundir expectativas con realidad. Explicó que muchas organizaciones llevan más de una década utilizando agentes de manera inconsciente —por ejemplo, en automatizaciones simples o sistemas reactivos— y enfatizó que no todos los procesos necesitan agentes avanzados basados en aprendizaje. Galán insistió en la importancia de entender qué tipo de agente aplicar en cada escenario para escalar de forma sostenible, afirmando: "Lo esencial no es sumarse a la moda, sino saber cuándo y cómo orquestar agentes que aporten valor real al negocio".
Por su parte, Santiago Castro, de NFQ, se centró en desmontar algunos mitos habituales sobre la autonomía de los agentes y presentó su visión sobre cómo evolucionarán en los próximos años. "Aunque la tecnología actual permite construir agentes que coordinan diversas fuentes de información y automatizan procesos complejos, la clave está en integrar estas soluciones con el conocimiento profundo de los procesos de negocio y las herramientas que ya utiliza cada compañía" comentó. "No se trata de implantar un agente y esperar milagros; se trata de construir un ecosistema donde los agentes sean aliados que potencien a las personas y ayuden a tomar decisiones con mejor información", concluyó.
Del entusiasmo a la realidad hay todavía un camino lleno de retos Durante la jornada, los participantes coincidieron en que los agentes representan un salto cualitativo respecto a los modelos de IA generativa tradicionales. No solo permiten responder a consultas o generar contenido, sino también percibir el entorno, razonar, planificar y actuar de forma autónoma. Sin embargo, muchas empresas siguen atrapadas en una fase de experimentación con proyectos piloto y casos de uso aislados, sin lograr todavía escalar estas soluciones a procesos críticos.
Uno de los grandes obstáculos señalados es la complejidad de los entornos corporativos, con sistemas heredados y arquitecturas poco preparadas para integrar agentes que requieren datos bien estructurados y accesibles.
A esta dificultad técnica se une la desconfianza hacia la autonomía de la IA, especialmente cuando se trata de delegar decisiones que impactan directamente en la operación o el cliente. "Es normal que exista reticencia cuando se plantea que un agente pueda tomar decisiones críticas", apuntó Tomás Martínez Bueno, presidente de AI-Network. "Pero la clave está en dotar a las personas de la formación necesaria para trabajar mano a mano con la tecnología, entendiendo sus capacidades y sus límites", añadió.
En este sentido, los asistentes subrayaron la importancia de impulsar programas de formación y reskilling que permitan a los equipos adaptarse a un entorno donde los agentes se conviertan en compañeros digitales capaces de multiplicar la productividad, automatizar tareas repetitivas o guiar procesos complejos, desde la gestión documental hasta la toma de decisiones basada en datos.
Gobernanza y estrategia, factores decisivos El debate sobre los beneficios y riesgos de los agentes derivó en una reflexión compartida: la clave no es la tecnología en sí, sino la capacidad de alinearla con los objetivos estratégicos, fomentar una cultura organizativa que abrace el cambio y preparar a los empleados para trabajar junto a los agentes. La estrategia, la visión a largo plazo y la gobernanza serán los factores diferenciales entre quienes aprovechen esta revolución y quienes se queden atrás.
La necesidad de un marco legal y regulatorio sólido también ocupó un lugar destacado en el encuentro. Normativas como el AI Act europeo se perciben como esenciales para ofrecer seguridad jurídica y guiar a las empresas en la implantación de agentes de forma responsable, ética y alineada con la protección de los derechos de clientes y empleados.
Madurez llegará de 5 a 10 años Respecto a las expectativas temporales, la mayoría de los asistentes situaron la verdadera madurez de los agentes autónomos en un horizonte de cinco a diez años, cuando las organizaciones hayan superado los obstáculos actuales y los agentes puedan desplegarse a gran escala como auténticos orquestadores de procesos. "Estamos en un momento clave para sentar las bases que permitan una adopción sostenible y segura de los agentes en el medio plazo", concluyó Martínez Bueno.
El encuentro terminó con un mensaje unánime: los agentes de IA ofrecen una oportunidad única para transformar la forma en la que se trabaja y mejorar la competitividad, pero para aprovechar todo su potencial será imprescindible construir una base sólida de datos, integrar a los agentes de forma estratégica y acompañar el cambio con formación y una cultura de confianza en la tecnología.
AI Directors, la comunidad directiva impulsada por AI-Network, reúne a más de 200 líderes empresariales que trabajan para compartir experiencias, aprender de casos de éxito y analizar las últimas tendencias en inteligencia artificial. Para unirse a este espacio exclusivo es necesario inscribirse en https://www.ai-network.org/ai-directors.