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Según el Ministerio de Sanidad, en 2024 se diagnosticaron más de 20.000 casos de cáncer de piel en España, entre ellos cerca de 7.900 melanomas, con una incidencia de 15 casos por cada 100.000 habitantes y una tendencia al alza de un 40% en los últimos cuatro años

Con motivo del Día Mundial del Cáncer de Piel, que se conmemora mañana, viernes 13 de junio, la dermatóloga de Policlínica Gipuzkoa, Ángela Estenaga, especialista, recuerda la importancia de protegerse del sol y vigilar los cambios en la piel. "Muchos de estos tumores se podrían evitar con buenos hábitos de fotoprotección y una autoexploración regular", subraya. 

En 2024 se diagnosticaron más de 20.000 casos de cáncer de piel en España, entre ellos cerca de 7.900 melanomas, con una incidencia de 15 casos por cada 100.000 habitantes y una tendencia al alza de un 40% en los últimos cuatro años. Afortunadamente, gracias a la detección precoz, la supervivencia a cinco años supera el 85%, según datos del Ministerio de Sanidad de 2025.

"El carcinoma basocelular es el tumor maligno más frecuente en humanos. Aunque la mayoría de los cánceres de piel tienen una baja mortalidad, no debemos restarles importancia, ya que pueden afectar notablemente a la calidad de vida y muchos podrían evitarse con hábitos adecuados", destaca la especialista.

Existen diferentes tipos de cáncer de piel, pero se dividen en dos grandes grupos: melanoma y no melanoma. "El melanoma es el más preocupante por su agresividad y porque puede afectar a personas jóvenes. En cambio, los carcinomas basocelulares y espinocelulares, aunque menos agresivos, son mucho más frecuentes y están muy ligados a la exposición solar acumulada a lo largo de los años", explica Ángela Estenaga. 

La exposición solar crónica y las quemaduras solares, especialmente en la infancia, son los factores de riesgo más relevantes y, a la vez, más evitables. "Hay que asumir que algunas pieles no pueden broncearse de forma saludable. Si para broncearte te tienes que quemar, mejor usar autobronceadores", recomienda la dermatóloga.

Con la llegada del verano, Estenaga recuerda que "además de aplicar crema solar con FPS50 antes de salir de casa, es clave reaplicarla cada dos horas, especialmente si nos bañamos o nos secamos con la toalla. También hay que evitar la exposición directa en las horas centrales del día y usar gorra, camiseta y gafas de sol".

Otra herramienta fundamental en la lucha contra el cáncer de piel es la autoexploración. "Debemos vigilar los lunares y manchas que tenemos, y acudir al dermatólogo si observamos cambios en el tamaño, forma o color, o si alguna herida no cicatriza en dos semanas. El cáncer de piel no suele doler, así que el dolor no debe ser un criterio", añade.

En cuanto a la detección precoz del cáncer de piel, la dermatóloga explica que "Lo más sencillo y accesible para todos es hacerse fotos periódicas con el móvil y compararlas cada seis u ocho meses", recomienda.

Para finalizar, Ángela Estenaga lanza un mensaje claro: "La piel es el órgano más grande del cuerpo y debemos protegerla. El moreno no es un signo de salud, sino una señal de daño solar. Cuidarla es también prevenir enfermedades graves".