Un equipo internacional de científicas adopta una alimentación 100% vegetal mientras navega por uno de los entornos más vulnerables al cambio climático
Parte del equipo internacional de científicas ha decidido participar en el reto de Veganuary mientras llevan a cabo una expedición antártica centrada en el clima. La ONG, que anima a la gente a probar el veganismo durante el mes de enero y más allá, ha inspirado a este grupo de mujeres a sumarse al movimiento que consideran una oportunidad para visibilizar la importancia de la alimentación en la crisis climática.
El equipo ve su participación en Veganuary como una forma de conciliar su acción individual con sus objetivos de estudiar y mitigar el cambio climático. La mayoría tiene pensado ampliar su participación a todo el tiempo que dure la expedición, que se extiende más allá de enero.
Las científicas forman parte del programa mundial de liderazgo ‘Homeward Bound’, dirigido a mujeres y personas no binarias con formación en ciencias, tecnología, ingeniería y matemáticas. El viaje tiene como objetivo educar sobre la Antártida, que es particularmente vulnerable al calentamiento global, y construir una comunidad de científicos y líderes comprometidos con la lucha contra el cambio climático.
¿Por qué han decidido sumarse a Veganuary 2025? Las científicas lo explican con sus propias palabras:
Alba Fernández Sanlés, Bióloga molecular e investigadora en Ciencias de la Salud Poblacional en la University College London (Española trabajando en Reino Unido): "De adolescente, me negué a comer mamíferos, a los que consideraba mis amigos. A los 17 años también dejé de comer pollo, y durante la veintena eliminé el pescado y el marisco de mi dieta. En mi treintena, sólo cocino con vegetales, y participo en Veganuary desde 2021. Aunque mis motivos iniciales fueron el bienestar animal, estoy muy comprometida con tomar acción frente a la crisis climática. Una manera sencilla de hacerlo es reducir parcial o totalmente el consumo de animales y de sus productos, y generar menos residuos. Y, pese a lo que muchos dicen, comer vegano, saludable y económico es posible".
Marta Crespo, Ingeniera Agrícola y especializada en energías renovables (España): "Unirme al proyecto Veganuary es aportar mi granito de arena a la lucha por el cambio climático. Es una iniciativa superinteresante que me permite reducir mi huella de carbono actuando directamente sobre el uso y la contaminación del agua debido al consumo actual de carne.
Los esfuerzos en Reutilizar o Reciclar no son suficientes en la lucha contra el cambio climático, sino que el cambio real empieza en Reducir, así que empecemos por reducir los consumos y residuos de lo que nos llevamos directamente a la boca. Teniéndolo tan fácil, ¿cómo no intentarlo?"
Emily S. Cross, Catedrática de Neurociencia Humana y Robótica Social de la Universidad Macquarie y la Universidad de Glasgow, y Directora del Laboratorio de Cerebro Social en Acción del Departamento de Ciencias Cognitivas de la Universidad Macquarie (Reino Unido y Australia): "Cada vez es más conocido que una dieta basada en plantas es más saludable para nuestro cuerpo y para el planeta. Sin embargo, hacer el cambio puede ser difícil. En 2002 me propuse pasar de una dieta omnívora a un veganismo estricto, que mantuve durante varios años, y luego volví a consumir pescado (nunca me han gustado los productos lácteos, así que el vegetarianismo me resultaba difícil, pero el veganismo era un sueño). Este año veo mi participación en Veganuary como una oportunidad para mostrar a mis dos hijos pequeños que podemos comer de forma deliciosa, saludable y sostenible, sin productos de origen animal".
Catherine Barry, Bióloga molecular en oncología (Chicago, Illinois, EE.UU.): "Da la casualidad de que lo mejor para mí es también lo mejor para el planeta".
Jess Leck, Coordinadora del Programa GhostNets Australia de la Fundación OceanEarth (Australia): "Si podemos vivir felices y sanos sin dañar a los demás, ¿por qué no íbamos a hacerlo? Para mí, una dieta basada en plantas es la forma más fácil de minimizar mi impacto en este planeta y sus criaturas".
Devin Fitzpatrick, Estudiante de doctorado, Facultad de Veterinaria de la Universidad de Calgary (Canadá): "La producción de carne y productos lácteos contribuye significativamente al cambio climático y a la degradación del medio ambiente debido a las emisiones de gases de efecto invernadero, la destrucción de hábitats y el consumo de agua, entre otras cosas. Dejé de comer carne hace más de 12 años para reducir mi impacto en el planeta, y me he alimentado de forma totalmente vegana durante Veganuary para concienciar sobre estos problemas. Creo que Veganuary es una gran iniciativa para familiarizar a la gente con un estilo de vida basado en plantas y mostrarles que es posible ser más flexibles con sus dietas durante el resto del año".
Natalia Atuesta Escobar, Ingeniera ambiental y bióloga especializada en conservación y gestión de la biodiversidad (Colombia): "Estoy comprometida con la creación de cambios sistémicos para hacer frente a la doble crisis del clima y la biodiversidad. Con mi trabajo facilito a empresas, comunidades y agentes del sector público herramientas y modelos para proteger la naturaleza y mejorar el uso sostenible de los recursos. No he cambiado radicalmente mi dieta, pero estoy convencida de que la alimentación está en el centro de la solución para mejorar los medios de vida y el impacto ambiental. Me uno a Veganuary siguiendo una dieta vegetal durante todo el viaje. Lo veo como una oportunidad para probar una dieta más consciente, reducir mi huella de carbono, deshacerme de algunas ideas preconcebidas y evaluar formas de incorporar la alimentación vegana a la vida cotidiana".
Kristina Burrack, Inmunóloga, investigadora y profesora adjunta (Minnesota, EE.UU.): "Voy a darle una oportunidad a Veganuary: comer sano también es sano para la Tierra".
Descargar aquí las fotos de las participantes.
Desde que Veganuary lanzó su primer reto en enero de 2014, han participado millones de personas, de prácticamente todos los países del mundo. Aquellos humildes inicios en una mesa de cocina en Yorkshire, en Reino Unido, se han convertido en campañas oficiales de Veganuary en España, Reino Unido, USA, Alemania, Chile, Argentina, India, Australia, Austria, Brasil, Francia, Grecia, Italia, Malasia, México, Perú, Singapur, Sudáfrica, Suiza y Canadá. Veganuary es ya un verdadero fenómeno global.