Una nueva ley sobre la venta de préstamos impagados podría excluir de su protección a la gran mayoría de los consumidores españoles endeudados
La ayuda a las personas vulnerables establecida en una nueva ley pretende permitir a la gente saldar sus deudas acordando planes de reembolso razonables con los bancos. Enmienda esta ley, restringiendo el acceso a los beneficios de esta nueva ley al cambiar la definición de "vulnerabilidad".Con el cambio de enfoque de la nueva ley se corre el riesgo de introducir cambios que podrían excluir a la gran mayoría de los consumidores españoles endeudados de las protecciones que ofrece cuando los préstamos al consumo se venden a agencias de cobro.
Maria Petrache, de Unifye SL, especialistas en deudas, declaró: "Cuando en 2005 se introdujo en el Reino Unido una legislación similar que abordaba la misma cuestión, la definición de cliente vulnerable y "vulnerabilidad" fue el principal punto de discordia, el ámbito en el que bancos y prestamistas buscaron una definición más estricta para restringir el acceso".
En términos económicos, para ser considerado deudor vulnerable en España hay que estar cobrando el Ingreso Mínimo Vital de 604,21 euros al mes, sin más detalle que este.
Esta práctica no es una regla razonable ni sensata para calificar a una persona como vulnerable, ya que hay muchas otras variables que podrían afectar a la incapacidad de una persona para devolver los préstamos contraídos.
Con estos ingresos, a una persona le resultaría muy difícil hacer frente a sus gastos básicos como el alquiler, la comida, los suministros, los gastos médicos y también pagar las cuotas de sus préstamos. Y en ciudades como Madrid o Barcelona, una persona ni siquiera podría subsistir con estos ingresos, consumiendo lo básico para mantenerse.
Para ser justa y razonable, la evaluación de un cliente vulnerable debe incluir todas las circunstancias de su situación; en primer lugar, sus ingresos, las cargas familiares, el número de personas a su cargo, los gastos médicos y educativos esenciales y otros gastos a los que todo ciudadano hace frente a diario.
La vulnerabilidad se basa en la asequibilidad real y en las circunstancias reales de la vida.
Es importante recordar que la ley solo permite a los consumidores proponer Planes de Pago para poder devolver el importe total a un ritmo que el deudor pueda permitirse. Esto es todo lo que el deudor "vulnerable" necesita y desea.
Se espera con impaciencia el texto definitivo de la ley y se espera que el futuro reglamento proteja y ampare razonablemente a las personas vulnerables, que es el principal objetivo de la ley.