La disfunción eréctil es un trastorno muy común que millones de hombres han experimentado alguna vez en su vida. Sin embargo, hoy en día hay una gran cantidad de mitos alrededor de este tema, lo que provoca que las personas afectadas no busquen el tratamiento adecuado. La disfunción eréctil es más que un problema de rendimiento sexual, es un indicador clave de la salud general de un hombre y puede ser un síntoma de problemas médicos mayores. Entender esta afección y ponerle el tratamiento adecuado es clave para mejorar el bienestar de uno mismo y de la pareja.
Algunos de los mitos más comunes son los siguientes:
1. La disfunción eréctil solo afecta a hombres mayores
Aunque no se puede negar que la edad es uno de los factores más importantes a la hora de padecer problemas de erección, la disfunción eréctil no se asocia únicamente con personas mayores. Esta afección también puede aparecer en hombres jóvenes y las causas pueden ser diversas, desde problemas de salud como la obesidad y la diabetes hasta factores psicológicos como el estrés y la ansiedad.
2. La disfunción eréctil es incompatible con la vida sexual
Padecer disfunción eréctil no necesariamente implica el fin de la vida sexual. Actualmente, gracias a los avances de la medicina, existen diversos métodos para intentar combatir este problema y disfrutar de las relaciones sexuales en pareja. En el mercado es posible encontrar desde prótesis e inyecciones, hasta tratamientos menos invasivos. En este último grupo se podría incluir a Eroxon®, un gel tópico innovador que ofrece una solución rápida, eficaz e indolora y que cuenta con dos ventajas: se puede adquirir en las farmacias sin receta y ayuda a obtener una erección en diez minutos después de la aplicación.
3. La disfunción eréctil solo afecta a la persona que la padece
Aunque la persona que más sufre es aquella que tiene este problema, la disfunción eréctil afecta también a las parejas. Puede tener un impacto muy significativo en las relaciones de una persona y la falta de comunicación aumenta las tensiones ya de por sí existentes. Por eso, dialogar con la pareja puede ser de gran ayuda para buscar la mejor solución. "Para disminuir la presión sobre este tema ayuda mucho que las parejas encuentren otras formas de disfrutar de la sexualidad que no impliquen la penetración ni que el pene esté en erección (masturbación, sexo oral, masajes, caricias etc.). De este modo, se mantienen el vínculo en la pareja, sin dejar de disfrutar, mientras se encuentra una solución desde la calma y con menos prejuicios", comenta Ana Lombardía, psicóloga y sexóloga.
4. La dieta no influye en la disfunción eréctil
Llevar una dieta adecuada no implica que un hombre no pueda padecer disfunción eréctil, sin embargo, se recomienda seguir una dieta saludable y equilibrada en nutrientes y calorías para tener menos opciones de sufrir este problema. Además, resulta fundamental evitar hábitos que impliquen una mayor probabilidad de sufrirlo, como el consumo de un exceso de azúcares, sal o grasas saturadas.
5. La disfunción eréctil solo afecta a la persona que la padece
Aunque la persona que más sufre es aquella que tiene este problema, la disfunción eréctil afecta también a las parejas. Puede tener un impacto muy significativo en las relaciones de una persona y la falta de comunicación aumenta las tensiones ya de por sí existentes. Por eso, dialogar con la pareja puede ayudar a buscar la mejor solución.
6. Hablar sobre la disfunción eréctil es vergonzoso
La vergüenza es una de las principales razones por la que los hombres no buscan ayuda a la hora de hacer frente a este problema. Sin embargo, abordar este tema con un profesional de la salud es el primer paso hacia una solución efectiva. Conocer las distintas opciones que hay y entender más sobre el tema es esencial para mejorar la calidad de vida de quienes la padecen y de sus parejas.
7. Aquellas personas que sufren disfunción eréctil no deben preocuparse
Es importante acudir a un especialista para saber qué ha provocado la aparición de este problema. En ocasiones, la disfunción eréctil puede ir asociada a problemas médicos más graves, como la obesidad, la diabetes o la hipertensión arterial. Por eso, es fundamental que un médico cualificado realice el diagnóstico correcto para tratar estas afecciones.
8. Si hay padecimiento de disfunción eréctil, es porque no hay atracción por la pareja
Puede que este sea uno de los pensamientos más comunes entre la sociedad, pero la disfunción eréctil no está necesariamente relacionada con la falta de atracción hacia otra persona. Existen diversas causas, tanto físicas como psicológicas, que pueden provocar este problema, por eso, es muy importante que los integrantes de una pareja entiendan que la atracción no es el único factor.
"Las parejas juegan un papel muy importante en las dificultades de erección y es importante contar con ellas para llevar la situación lo mejor posible y solucionarlo. Es frecuente que muchas mujeres se culpen a sí mismas si su pareja tiene dificultades en este terreno debido a ciertos cuestionamientos propios y que esto genere inseguridades y conflicto en la relación. Es importante que ellas comprendan lo que está sucediendo y que no se culpen, para disminuir el malestar y poder afrontar la situación desde otro punto y con menos presión", concluye la psicóloga y sexóloga Ana Lombardía.
Los hombres que sufren disfunción eréctil deben abordar el problema con una perspectiva informada y sin prejuicios. Desmontar los mitos que hay alrededor de la disfunción eréctil permite a los hombres entender que no están solos y que pueden encontrar soluciones efectivas que les ayuden a mejorar su calidad de vida.