Profesionales del gremio del gas y las calderas junto con técnicos de electrodomésticos dan una serie de consejos para poder eludir los posibles problemas que se generan con instalaciones de gas defectuosas o con algún inconveniente en los elementos que los conforman
El gas natural se considera una fuente de energía segura, sin embargo, el olor a gas natural, podría ser un signo de fuga y podría volverse peligroso si por algún motivo una llama, chispa o cualquier cuerpo incandescente lo prende.
En la web de la empresa instaladordegas.es tienen información sobre cómo intentar prevenir incidentes después de que haya habido una explosiones de gas natural en Paiporta con dos heridos.
''El gas natural es incoloro, insípido e inodoro en su estado natural'', afirma Carlos trabajador de la empresa antes mencionada y que asegura que ''en algunas zonas de Estados Unidos utilizan metil mercaptano, un aditivo de seguridad en el gas natural para darle un olor a huevo podrido, lo que lo hace más fácil de detectar''.
''El problema no viene por la pérdida del gas en sí, sino que si se tiene algún electrodoméstico en mal estado o un enchufe puede haber una explosión'' indica Eliot, responsable de reparación de electrodomésticos desde la web reparaciondelavadorasenmadrid.es. Una de las reparaciones que más realizan son problemas de cortocircuitos, los cuales pueden derivar en una descarga eléctrica que hará las veces de detonante del combustible gas.
Por otro lado, el problema del gas también puede dar otro fallo peligroso para la salud y es que una fuga de monóxido de carbono en cualquier lugar puede enviar a muchísimas personas al hospital y puede provocar la evacuación de un edificio y la de los que están alrededor.
''Si huele a gas dentro o fuera, abandone el área inmediatamente'', es el consejo que da Jordi desde la web de empresa en Barcelona instaladordegasbarcelona.es ''El monóxido de carbono, o CO, es un gas que generalmente se encuentra en los humos del combustible quemado de motores pequeños, estufas, linternas, parrillas, chimeneas, estufas de gas u hornos. Los que respiran demasiado pueden morir''.
Dado que el CO puede acumularse en el interior y envenenar a quienes lo respiran, casi todos están en riesgo, aunque los bebés, los ancianos, las personas con enfermedades cardíacas crónicas, la anemia o los problemas respiratorios tienen más probabilidades de enfermarse. Más de 400 personas mueren a causa de la inhalación de CO involuntaria.
Los síntomas de envenenamiento por CO a menudo se describen como ''similares a la gripe''. Cualquiera que respire mucho CO podría desmayarse o morir. Los síntomas comunes de la intoxicación por monóxido de carbono se encuentran a continuación: dolor de cabeza, mareo, debilidad, malestar estomacal, vómito, dolor de pecho y confusión.
Para ayudar a prevenir el envenenamiento por CO en el hogar, los profesionales ofrecen los siguientes consejos:
Hacer que un técnico cualificado realice el mantenimiento del sistema de calefacción, calentador de agua y cualquier otro artefacto que funcione con gas, petróleo o carbón cada año.
No usar calentadores químicos portátiles sin llama en interiores.
Si huele a gas desde la nevera solicitar una revisión a un experto como los de reparaciondefrigorificosmadrid.es; un olor del frigorífico puede significar que podría estar perdiendo CO.
Cuando se compren equipos de gas, comprar solo equipos que lleven un sello de una agencia de calidad como AENOR.
Asegurarse de que los aparatos de gas estén bien ventilados. Las tuberías de ventilación horizontales para aparatos, como un calentador de agua, deben subir ligeramente a medida que avanzan hacia el exterior, como se muestra a continuación. Esto evita que el CO se escape si las juntas o tuberías no están bien ajustadas.
Nunca parchear un tubo de ventilación con cinta o alguna otra cosa. Este tipo de parches puede hacer que se acumule CO en el hogar.
Nunca usar un horno de gas para calentar la casa puede ser causa de una acumulación de CO en el hogar.