Los bootcamps están concebidos como formación de corto plazo pero intensiva. La mayoría de los graduados de bootcamps encuentran empleo a tiempo completo, y el 73% de los graduados encuestados lo ha hecho en uno en el que se pedían las habilidades aprendidas, con un aumento promedio de salarios del 64%.

Formación a pie de campo. Aunque en el ámbito militar también existen muchos de estos bootcamp, el sector tecnológico es uno de los que más está explorando estas vías como formación de todas aquellas personas que quieren conocer y saber más acerca de determinadas tecnologías. Incluso hay bootcamps específicos en seguridad tecnológica para los cuerpos y fuerzas de seguridad del estado.

Los bootcamps están concebidos como formación de corto plazo (estos cursos apenas tienen unas semanas de duración), pero muy intensiva. En algunos casos, estamos ante una formación de inmersión y los participantes se reúnen durante los días que dura el curso para estar prácticamente todo el día relacionándose con la tecnología en cuestión.

Hay cursos en los que, además, se quiere aprovechar todas estas semanas de convivencia para incluir el entrenamiento tanto de habilidades técnicas como interpersonales.

Instrumento para mantenerse al día Igual que un médico no puede conocer todas las especialidades que hay en la materia, el personal tecnológico no puede dominar todas las tecnologías que hay. Por eso, estos bootcamps son una buena manera de adentrarse en nuevos conceptos y materias. Muchos de ellos están centrados en el desarrollo de software.

Como explica Gonzalo Manrique, co fundador de Ironhack (empresa española que se dedica a esta formación), "las tecnologías y las herramientas evolucionan rápidamente", por lo que estos bootcamps son un buen instrumento para mantenerse actualizado.

El 95% de los graduados en IronHack encuentran empleo a los 3 meses de finalizar sus estudios

Aunque muchos de los asistentes a estos cursos no tienen ni idea de la tecnología o lenguaje de programación sobre el que versa el bootcamp (en muchos de estos cursos de formación se introducen incluso los conceptos fundamentales de programación), en algunos casos sí se recomienda tener una mínima experiencia en escribir código (aunque sea por tu cuenta).

Eso sí, no hace falta tener un título universitario ni éste tiene porqué ser, obligatoriamente, de la rama STEM (Ciencias, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas). "Nosotros testamos la capacidad de aprender del alumno", explica Manrique, quien recuerda que entre sus alumnos han llegado a tener personas "que ni habían acabado el bachillerato. También hemos tenido alumnos que han pasado por carreras y formación profesional sin haber acabado la formación y han completado con éxito nuestros bootcamps".

El cofundador de Ironhack también reconoce que cada vez tienen más alumnos procedentes de carreras como ADE (Administración y Dirección de Empresas), "gente emprendedora que quiere tener unos conocimientos web".

Un entrenamiento (casi) militar Este tipo de formación de alta intensidad y en un corto plazo de tiempo puede considerarse casi como de estilo militar. Hay que estar muy bien preparado, también psicológicamente, para llevar a cabo esta formación.

Compañías como Facebook, Uber o Twitter, entre otras, suelen incorporar alumnos de bootcamps en sus equipos de desarrollo

Aunque muchos de los que se ofertan en España son de un fin de semana, en Estados Unidos estos cursos suelen durar hasta 3 meses, por lo que algunos de los estudiantes deben pedir una excedencia laboral para poder hacerlos. Por eso también se recomienda mucho el estudiar muy bien el tipo de bootcamp que se quiere realizar, conocer muy bien el programa, las posibilidades después de hacerlo o hablar con antiguos alumnos antes de decantarnos por una u otra oferta formativa.

Además, en algunos casos, los programas realizarán pruebas de nivel de conocimiento de codificación, además de alguna entrevista personal, con el fin de garantizar que el estudiante es idóneo para el curso en el que se quiere apuntar.

Un primer paso para ser junior Realizar uno de estos cursos de formación capacita al estudiante para conseguir un trabajo relacionado con la tecnología estudiada. Eso sí, el puesto suele ser del estilo de desarrollador junior.

No es obligatorio un título universitario ni formación técnica para realizar un bootcamp, pero unos mínimos conocimientos sí son recomendables

Estos bootcamps son muy bien vistos y valorados por cada vez más empresas, especialmente tecnológicas de tamaño medio y en crecimiento. Precisamente por su idiosincrasia, suelen recibir con los brazos abiertos a desarrolladores jóvenes para que se integren en sus equipos de ingeniería.

Compañías como Facebook, Uber o Twitter, entre otras, suelen incorporar alumnos de bootcamps en sus equipos de desarrollo.

Algunos de estos bootcamps son gratuitos, pero otros pueden llegar a suponer un desembolso importante de dinero, especialmente si vas a querer cruzar el charco y hacerlos en Estados Unidos, donde la oferta es muy amplia y variada y donde hay muchas empresas especializadas en ofertar este tipo de cursos de formación.

Una inversión alta, pero rentabl Pero los bootcamps tampoco son la panacea. Los que son muy cortos de duración porque, quizá, desvirtúen el concepto mismo de bootcamp. Tienes que tener en cuenta, además, que hacer un bootcamp puede suponer, en algunas ocasiones, una inversión importante de dinero.

Los bootcamps ofrecen una educación mucho más centrada en lenguajes de programación y son una vía más rápida para trabajar que la universidad, pero lo cierto es que aún no hay regulación en la materia y no siempre tienen el reconocimiento de un título oficial como el que consigues con un master.

La mayoría de los graduados de bootcamps encuentran empleo a tiempo completo, y el 73% de los graduados encuestados lo ha hecho en uno en el que se pedían las habilidades aprendidas, con un aumento promedio de salarios del 64%.

Sin embargo, y a tenor de algunos informes, puede decirse que cursar un bootcamp es muy rentable. La mayoría de los graduados de bootcamps encuentran empleo a tiempo completo, y el 73% de los graduados encuestados lo ha hecho en uno en el que se pedían las habilidades aprendidas, con un aumento promedio de salarios del 64%.

La empleabilidad de esta formación es algo por lo que se lucha. Así, el cofundador de Ironhack asegura que ellos están muy cerca de la industria y con las empresas, tanto para saber qué formación se demanda como para ofrecer candidatos con estos perfiles. "El 95 por ciento de nuestros alumnos están colocados a los 3 meses de graduación".

Un curso para cada necesidad Hay casi tantos bootcamps como tecnologías y lenguajes de programación. ¿Cuál elegir entonces?

Aunque en España no existe una página parecida (o al menos nosotros no la conocemos), en Bloc se ofrece una comparación de la oferta formativa estadounidense en diferentes campos: en función de cuál sea el objetivo de cada usuario (desde inicarse en algún campo hasta conseguir un empleo), el tiempo de duración, coste, etc. Puede servir para establecer unos criterios propios a la hora de comparar la oferta local.

En muchos de estos casos, no sólo se debe buscar el curso que mejor se adapte a cada uno, sino que también es importante que amoldarse a las características del curso, bien sea por duración, horarios o materiales.

No hay que olvidar, además, que seguramente se deba acudir con el propio equipo, un ordenador que resulte también muy versátil, capaz de adecuarse a diversas situaciones y de superar estos entrenamientos "militares".

La noticia "¿Por qué cada vez más los programadores informáticos prefieren un bootcamp a una carrera?" fue publicada originalmente en Xataka.