Los niños que son bilingües con el dominio de un hablante nativo tienen una serie de ventajas sobre sus compañeros de clase. En los últimos años, se han llevado a cabo varios estudios relacionados con la neuropsicología del bilingüismo y enseñanza de lenguas extranjeras. Muchos de ellos destacan los beneficios prácticos de esta capacidad para utilizar dos lenguas en cualquier situación comunicativa y con la misma eficacia, relacionándolo con la flexibilidad intelectual