Desde hace décadas, el mundo de la piscina gravita constantemente alrededor de cómo realizar un mantenimiento de la piscina lo más eficiente posible sin que resulte dañino para las personas. Sobrecargar la piscina con productos químicos obviamente es una forma eficaz de evitar que el moho, la suciedad y las bacterias prosperen, pero hacerlo a costa de la salud de los que desean disfrutar de su piscina sin miedo a sufrir problemas de salud no es buena idea