Alcanzar una buena relación personal con el paciente y la cuidadora es fundamental para desarrollar mejor las tareas de asistencia domiciliaria, con el fin de garantizar un buen bienestar y una calidad de vida excelente
Cuidar a una persona mayor es mucho más que dar ayuda durante el día a día. Las cuidadoras profesionales de personas mayores deben reunir unas características especiales para poder ofrecer la atención y el apoyo necesario. Deben ser comprensivas, empáticas, sensibles y pacientes para establecer un vínculo emocional con el paciente en cuestión.
Muchas personas mayores necesitan cuidados especiales que muchas veces sus familiares no pueden ofrecerles, ya sea por falta de tiempo o por desconocimiento en el área. En estos casos es fundamental contratar un servicio de asistencia domiciliaria que pueda ofrecer la seguridad y cuidado de las personas mayores, con todos los cuidados que necesiten para llevar una vida lo más normal y tranquila posible.
SEPES Atención Domiciliaria es consciente de que es fundamental conseguir una buena relación entre la cuidadora y el paciente. Por eso, esta empresa de atención domiciliaria trabaja siempre con estos tres valores: la sensibilidad humana, el respeto hacia las personas y la excelencia de trabajo.
La clave de la buena convivencia es la comunicación y el respeto. Es importante entender la perspectiva del adulto, y no con el fin de imponer una decisión. Poco a poco, con las acciones correctas, se podrán apreciar todas las ventajas que pueden obtenerse de contar con el apoyo de un tercero.
Puntos claves para establecer una buena relación personal
El servicio de asistencia domiciliaria a una persona mayor busca mejorar la calidad de vida, ofrecer compañía, seguridad e incluso tranquilidad a la persona que recibe los cuidados, así como a sus familiares. Para conseguir una buena relación personal se recomienda:
- Respeto y confianza.
- Empatía y comunicación.
- Trabaja la función cognitiva.
- Usar elogios.
- Mantener la atención y conversación frecuente.
- Establecer límites.
Es importante cuidar a una persona mayor
Cuidar es una tarea muchas veces vocacional donde el papel de la cuidadora es fundamental en las necesidades vitales de una persona mayor, como son la alimentación, la higiene o la administración de medicamentos.
Sin embargo, es importante ayudarles también a sentirse activos para que puedan seguir disfrutando de una vida plena y feliz, lo que se puede conseguir a través de las actividades de ocio y tiempo libre, manteniendo sus hobbies y favoreciendo las relaciones sociales . Pero, sobre todo, escuchándolos y haciéndoles partícipes de las decisiones.
Gemma Montero, CEO de SEPES Atención Domiciliaria, explica que "lograr crear una buena relación personal con el paciente permite que la persona mayor vuelva a realizar actividades comunes como ir al teatro, salir a pasear, mantener una buena higiene personal, tener una alimentación equilibrada , entre otras muchas".
