Lo ha hecho esta tarde, en la Plaza de la Iglesia de la pedanía parejana, frente a la portada de su maravillosa iglesia románica, después de que el viejo olmo muriera víctima de la grafiosis y fuera retirado el pasado mes de enero
En la tarde de hoy vecinos de la localidad de Cereceda, acompañados por el alcalde de Pareja, Javier del Río, por el concejal Inocente del Río, y por operarios de la Brigada Municipal han llevado a cabo la plantación de un olmo resistente a la grafiosis en la emblemática Plaza de la Iglesia de la pedanía parejana.
El olmo ya preside, con el maravilloso edificio románico a su espalda, la bella y sencilla ágora del pueblo. Javier del Río agradecía la presencia y colaboración a los vecinos que han acompañado y participado del momento, y también al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación la donación del ejemplar resistente a la grafiosis que se ha unido a la tierra en el centro de la hermosa atalaya sobre La Alcarria que es la pedanía parejana.
El nuevo, sustituye el anterior olmo, que había muerto víctima de la grafiosis después de varias décadas dando sombra y favoreciendo la conversación y el encuentro de los vecinos de Cereceda. Pese a que el Ayuntamiento había venido aplicando los tratamientos indicados por los técnicos, el viejo árbol no pudo superar la grafiosis, y hubo de ser retirado el pasado mes de enero. El recién reemplazado ejemplar había tomado el relevo, a su vez, de otro anterior, en aquel caso sí centenario.
“Afortunadamente, la ciencia, y el Ministerio de Agricultura en este caso, lleva décadas trabajando para conseguir ejemplares resistentes a la grafiosis. Hoy, hemos hecho en Cereceda, lo mismo que hicimos en Pareja en 2016. Ahora, tanto en Cereceda como en Pareja, el olmo vuelve a ser el centro de la plaza, como es tradición secular en las dos Castillas y por supuesto, también en La Alcarria”, señalaba el alcalde de Pareja, quien pedía, además, a los vecinos de Cereceda, “que lo cuiden y lo mimen, como estoy seguro que así va a ser, porque ya es parte de su patrimonio natural y vivo”.
El olmo es, probablemente, el árbol más querido por los guadalajareños. Rara fue la plaza donde no había uno, para solaz de los vecinos, cuya sombra era el lugar idóneo para socializar, quedar, contar historias, o incluso antaño, celebrar los concejos. Ahora, poco a poco, los nuevos y resistentes ejemplares regresan a los pueblos, como acaba de ocurrir ahora en Cereceda.
El Ayuntamiento de Pareja había traído el ejemplar recién plantado desde Segovia. Al nuevo ejemplar, no le hace falta tratamiento químico alguno de fungicidas o insecticidas para evitar la grafiosis. Basta con mantener la tierra húmeda y regarlo, en verano, cada 15 días.
Los operarios municipales habían practicado previamente el hoyo necesario para acoger sus raíces. Sobre él, se ha añadido tierra vegetal y abono de liberación lenta para aportar nutrientes, y, sobre todo el cariño de los vecinos y munícipes, que será, sin duda el mejor fertilizante.