Un operador logístico es fundamental en la actualidad, a pesar de que muchas personas desconocen sus funciones. Es una empresa que se especializa en logística, es decir, de planificar, organizar y ejecutar los distintos procesos necesarios para que otra empresa cumpla con su cadena de suministro. Habitualmente, esto funciona mediante un contrato de prestación de servicios con el que se va a establecer que el operador realice unas funciones y el cliente pague por esos servicios.
Un operador logístico se encarga de dirigir las operaciones, entre ellas, las relacionadas con el transporte, el almacenamiento de mercancías, además de su distribución, la gestión de la información del proceso y su entrega en los destinos que correspondan.Gracias a sus conocimientos, estructuras y capacidades, será posible optimizar procesos, reducir costes, y garantizar la seguridad, además de que se podrá contar con aquellas tecnologías a las que no se podría acceder de cualquier otra forma debido a sus altos costes.Esto permite centrar el negocio en aquellas áreas que producen valor, por lo que es una buena decisión el externalizar una idea compleja como puede ser la logística a alguien con mayor capacidad y experiencia.
Los requisitos que se necesitan para contratar a un operador logístico se deben tener muy en cuenta a la hora de solicitar sus servicios. El operador logístico debe garantizar ciertas cuestiones a la empresa, como por ejemplo el uso de una infraestructura adecuada donde los productos cuenten con la mayor seguridad posible. En el caso de mercancías delicadas, como la alimentaria o la farmacéutica, esto es especialmente importante. Otros factores que se deben tener también en cuenta son los equipos de buena calidad, tanto los tecnológicos como el equipamiento mecánico del almacén. Si se ofrece, además, una póliza de seguros para la mercancía, también se podrá obtener una garantía.
Las ventajas que ofrece un operador logístico son múltiples. Estos garantizan servicios que las empresas generalmente no pueden realizar por sí solas. Es común que si estas se dedican, por ejemplo, a la elaboración de vinos, solamente se centren en cómo producir dichos vinos. Sin embargo, el encargado del proceso de distribución, almacenamiento, embalaje y cuidado se suele dejar a manos de un operador logístico.
Estas compañías cuentan con todos los equipos y el personal adecuado para realizar estas labores. En términos económicos, el pago de un operador logístico es incluso mejor decisión que la inversión, porque además de sumar el riesgo necesario para acometer determinadas funciones con garantías. Esto deja bastante tiempo para que las empresas se centren en el mercado y eviten tareas que no aportan ningún valor a su modelo de negocio, delegándolas en profesionales que de verdad sepan sobre estos temas.
Otra cuestión que también es importante, es la sincronización de stock, productos y pedidos, ya que al trabajar con un operador logístico que esté especializado en e-commerce, este deberá disponer de un sistema de gestión de Almacén con un interfaz contras las tiendas. Estas sincronizaciones deben realizarse de forma periódica en tiempo real para tener los procesos relacionados con logística totalmente controlados e integrados para el e-commerce. A través de estos procesos se podrá optimizar de una manera clara el funcionamiento de una empresa.
Por ese motivo, la contratación de un operador de logística es tan importante, ya que ellos se encargan de tratar y controlar procesos para los que las empresas no tienen tiempo o conocimiento, y contribuyen de gran manera en la prosperidad de cualquier negocio y sus ventas.