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Sin diversión, no hay aprendizaje. Bajo esta premisa nació en 2016 el Club de la Escuela de Ski Baqueira, una iniciativa que ya cuenta esta temporada con más de 200 socios

Sin diversión, no hay aprendizaje. Bajo esta premisa nació en 2016 el Club de la Escuela de Ski Baqueira, una iniciativa que ya cuenta esta temporada con más de 200 socios.

La fidelización de los esquiadores más jóvenes es uno de los pilares fundamentales a la hora de desarrollar una escuela de formación deportiva, por eso, tal y como explica Laia Sol, directora del Club, “el objetivo principal es que además de aprender técnicas y seguridad en la montaña, disfruten del aprendizaje y se motiven para seguir con nosotros año tras año”.

Actualmente, los grupos de trabajo están comprendidos por niños de entre 4 y 17 años, todos muy homogéneos, estructurados por nivel deportivo y edad. “De este modo conseguimos que la progresión y la dedicación sean mayores”, añade la directora.

El grupo de los socios más veteranos (Club FreeSki) está enfocado al Freestyle y el Freeride, con trabajos de tecnificación en pista, fuera de pista y formación teórica. Lo que es común en todos los grupos, de pequeños a mayores, es la transmisión de valores, como hábitos de vida saludables y compañerismo. “Utilizamos el concepto de grupo para promover la unidad, la cooperación y el respeto por las diferencias individuales”.

La oferta que la escuela ofrece a las familias que quieran unirse al Club es muy flexible, ya que va desde 10 días, hasta 15, 25 o 55 a gastar dentro del calendario. Por supuesto, siempre asegurando el mismo profesor y grupo toda la temporada.

El Club complementa así la actividad de la Escuela de Ski Baqueira, que ofrece a lo largo de la temporada más de 20.000 horas lectivas en la práctica de esquí, snowboard y otras modalidades de deportes de nieve para personas de todas las edades. La escuela, que en la temporada 2019/2020 cuenta con más de 80 monitores titulados en plantilla, cumplirá en 2021 diez años al frente de la formación de esquiadores en las pistas de la estación de Baqueira-Beret en el valle de Arán.