Según diferentes estudios globales, la alimentación es uno de los factores claves en la percepción de bienestar. Se es lo que se come pero, a menudo, se comen alimentos que sientan mal. La genética permite hoy abordar ese objetivo de bienestar a partir de una información precisa y personalizada que asegura el éxito
El test WELLNESS CHECK de Laboratorios Synlab ofrece un estudio genético enfocado en diferentes procesos metabólicos relacionados con la nutrición y el bienestar, permitiendo un ajuste personalizado de la dieta que ayuda a optimizar el estado de salud de cada persona. Los genes influyen de manera relevante en el metabolismo de los alimentos que ingerimos y, por tanto, en el efecto que los alimentos tienen en el organismo.
WELLNESS CHECK determina variantes genéticas en 24 genes relacionadas con la nutrición y el metabolismo:
Intolerancia a la lactosa y celiaquía La intolerancia a la lactosa y/o sensibilidad al gluten pueden desencadenar sintomatología adversa que empeora la calidad de vida de los que la padecen. En este sentido, la detección de marcadores genéticos de intolerancia a la lactosa y/o predisposición al desarrollo de la enfermedad celíaca podría permitir, mediante un abordaje nutricional, mejorar el estado de salud de aquellas personas que sin saberlo sean portadoras de alguno de estos marcadores.
Sensibilidad a la sal Una excesiva presencia de sodio (o lo que es lo mismo la sal, compuesta por sodio y cloro) en sangre puede causar el aumento de la presión arterial pudiendo desencadenar hipertensión en aquellas personas genéticamente predispuestas.
Alcohol y la cafeína En el organismo existen enzimas específicas que procesan la cafeína y el alcohol. Con este análisis se obtiene información sobre la efectividad del metabolismo para procesar estas sustancias.
Colesterol y perfil lipídico Los niveles de colesterol y triglicéridos se ven influenciados no únicamente por la dieta, sino también por el perfil genético de cada persona, por lo que conocer si se presenta un mayor riesgo de tener niveles elevados de estos lípidos puede ayudar a ajustar la dieta de manera acorde.
Metabolismo de la homocisteína La homocisteína es un aminoácido que produce el organismo al metabolizar la metionina contenida en las proteínas de la dieta. Numerosos estudios sugieren que el exceso de homocisteína en sangre constituye un factor de riesgo cardiovascular relevante. Este exceso puede deberse tanto a alteraciones genéticas como a un déficit de las vitaminas B6, B12 y ácido fólico.
Detoxificación hepática A través de la nutrición y el entorno se expone a la entrada de sustancias tóxicas que deben ser eliminadas del organismo mediante la detoxificación hepática. Conocer la eficiencia de este mecanismo permite adaptar el estilo de vida para minimizar la exposición a sustancias tóxicas. La acumulación de tóxicos en el organismo está relacionada con diferentes enfermedades como el asma, alergias o trastornos del neurodesarrollo.
Estrés oxidativo Un aspecto muy importante sobre el impacto del entorno en el organismo es el estrés oxidativo. El desequilibrio entre prooxidantes y antioxidantes puede conducir al daño de tejidos y órganos y está involucrado en el desarrollo de numerosas enfermedades cardiovasculares, neurológicas, degenerativas, etc.
Respuesta inflamatoria La inflamación es un mecanismo de defensa natural en el organismo; sin embargo, una respuesta inflamatoria excesiva puede tener consecuencias negativas en la salud, contribuyendo al desarrollo de enfermedades autoinmunes, metabólicas y cardiovasculares.
Riesgo de osteoporosis A través del ADN se puede determinar cuál es la tendencia genética a tener correctos o alterados los niveles de densidad ósea. Esto permitirá ajustar la ingesta de micronutrientes a través de una dieta apropiada.
El test está indicado para personas que deseen mantener y mejorar su estado de salud actual, previniendo, en la medida de lo posible, las enfermedades crónicas frecuentes de la edad adulta. También se recomienda a personas con antecedentes familiares de enfermedades frecuentes de la edad adulta, y personas con alteraciones de neurodesarrollo o enfermedades crónicas, para mejorar su calidad de vida mediante la nutrición.