img

El mismo Dr. Juan Ribas defenderá los resultados de este estudio en el Congreso Internacional sobre Controversias en la Fibromialgia, que tendrá lugar el 4 y 5 de marzo en Viena

La andulación es capaz de aumentar la sensación de bienestar, disminuir el nivel de dolor (VAS) y el volumen de las extremidades inferiores, así como aumentar el umbral del dolor en pacientes con fibromialgia. Esta es la conclusión del estudio titulado ‘Respuestas fisiológicas de los pacientes con fibromialgia a una terapia de ondas vibratorias (andulación)’, realizado por el Dr. Juan Ribas y Alba Parras Moltó, del Departamento de Fisiología Médica y Biofísica de la Facultad de Medicina de la Universidad de Sevilla.

Congreso Internacional sobre Controversias en la Fibromialgia Este estudio estará presente en el próximo Congreso Internacional sobre Controversias en la Fibromialgia con un poster que será defendido por el mismo Dr. Ribas.

El congreso tendrá lugar los próximos 4 y 5 de marzo en Viena, con el objetivo de exponer y arrojar luz constructiva sobre algunas de las controversias centrales que existen sobre la fibromialgia; y con el fin de forjar el entendimiento y una base para la colaboración en el futuro.

En el Congreso de Viena se darán cita investigadores, clínicos, especialistas en fibromialgia, expertos en tratamientos y otras personas relacionadas con el sector. Durante los dos días se trataran diversos temas centrados en seis áreas principales: los fundamentos neuro-biológicos de la fibromialgia y el dolor centralizado; clasificación, diagnóstico, epidemiología y el concepto evolutivo de la fibromialgia; genética, farmacogenética y epigenética en la comprensión de la fibromialgia; el tratamiento de la fibromialgia, convencional y no convencional; combinación de diversas líneas de investigación en el estudio de enfermedades complejas relacionadas con el sistema nervioso central, como la fibromialgia; y lidiando con el ‘dolor transparente’: cómo la sociedad trata la fibromialgia.

Detalles del estudio Las vibraciones se han estado utilizando para fines terapéuticos desde hace muchos años. La más conocida es la plataforma vibratoria de cuerpo entero, pero la evidencia demostrada hasta ahora de sus efectos era de poca calidad.

El estudio realizado por el Dr. Ribas y Alba Parras sobre los beneficios de la andulación en pacientes con fibromialgia tenía como objetivo determinar los efectos fisiológicos producidos por una terapia de vibración ondulada multidireccional en el umbral del dolor, la percepción del dolor, la percepción del bienestar y el volumen de las extremidades inferiores en un grupo de pacientes con fibromialgia.

Para llevar a cabo este estudio participaron 12 pacientes diagnosticados clínicamente con fibromialgia y 12 sin fibromialgia. Ambos grupos recibieron tratamiento con el dispositivo sanitario Andumedic 30 minutos al día durante 5 días. Además, se contó también con un grupo de control que descansó sobre el mismo dispositivo pero sin recibir la terapia vibracional. El umbral del dolor se evaluó con un algómetro o dolorímetro, el dolor y la percepción de bienestar se puntuaron mediante una escala analógica visual, y el volumen de las extremidades inferiores mediante la técnica Kuhnke.

Finalizado el tratamiento, se mostró una tendencia al aumento del umbral del dolor en el grupo de pacientes con fibromialgia. El nivel del dolor disminuyó en un 35% de media, mientras que la sensación de bienestar aumentó en un 32,4%.

Tecnología de andulación La tecnología de andulación fue creada por la multinacional alemana Home Health Products hace más de 15 años, y combina las vibraciones mecánicas controladas con calor por infrarrojos. Estos dos tratamientos se combinan en un dispositivo sanitario que mantiene al paciente en posición horizontal, favoreciendo su relajación.

Durante todos estos años, la andulación ya ha ayudado a más de 200.000 personas en todo el mundo a aliviar su dolor y mejorar su calidad de vida, no sólo a pacientes con fibromialgia, sino también aquellos con otras patologías asociadas al dolor crónico.

Según la Sociedad Española del Dolor, casi el 20% de la población española padece de dolor crónico.