CEO de todo el mundo, provenientes de los más variados sectores y nacionalidades, se reunieron recientemente en la China Europe International Business School (CEIBS) de Shanghái con motivo del primer módulo del Global CEO Program. A lo largo de la semana que duraba el módulo, los temas tratados abarcaron desde las diferentes vías para ampliar la presencia global de las empresas, hasta nuevos enfoques de liderazgo o formas de motivar al personal.
“Es una oportunidad para intercambiar ideas con otros CEO,” afirma Michael O’Keeffe, CEO de Emeis Cosmetics en Melbourne (Australia). “Este primer módulo sobre la voluble economía china ha sido excelente”, aseguró O’Keeffe. “Hemos profundizado en muchos aspectos sobre el país, ampliando nuestros conocimientos sobre los retos, oportunidades y también sobre los conceptos erróneos que presenta este mercado”. A medida que el programa avanza, O’Keeffe espera que el Global CEO Program le proporcione “conocimientos profundos sobre las oportunidades, retos y amenazas para mi negocio en el contexto de los años que están por venir”.
Cambiando las perspectivas
O’Keeffe es uno de los CEO que están cursando el programa. Los participantes quieren entender mejor el arenoso contexto global en el que operan sus organizaciones. Dar un paso atrás para reflexionar y analizar el contexto, dice O’Keeffe, es una forma de “explorar nuevas maneras de gestionar una empresa internacional, mejorar la eficacia de la organización y desarrollar cualidades de liderazgo”. Ajay Pal Singh Arora coindice con O’Keeffe. Director regional de Tata Consulting Services, una empresa de IT y soluciones de negocio con sede en Bélgica, Arora nos cuenta que “ya han pasado 20 años desde que estudié gestión de empresas”. El programa y los participantes le ayudarán a entender los “paradigmas cambiantes” y los “nuevos modelos académicos” de forma que pueda implementarlos cuando regrese a su compañía.
Mentalidad internacional
El alcance internacional del programa, con módulos impartidos en hubs estratégicos de negocios globales, fue una de las principales razones por las que O’Keeffe decidió cursar el Global CEO Program. “El mismo programa es profundamente internacional, con clases impartidas en Europa, Asia y Estados Unidos. Y esto es importante, porque la ubicación física de cada módulo amplía tu perspectiva”, cuenta O’Keeffe.
El primer módulo, que se imparte en China, constituye la fase asiática del programa. Los siguientes módulos están programados en The Wharton School, en Philadelphia, y en el campus del IESE en Barcelona, ya en 2016. Reunir a CEOs para compartir ideas, aprender los unos de los otros y reflexionar sobre sus capacidades de liderazgo es una “experiencia prácticamente inigualable”, afirma O’Keeffe. “El altísimo nivel, tanto de los participantes como de los profesores, no tan solo crea un ambiente de aprendizaje productivo, sino también valiosas oportunidades de networking y la ocasión de ayudarnos los unos a los otros”.
Al fin y al cabo, “se puede estar muy solo en la cima”, recuerda Arora, algo que el Global CEO Program sin duda aspira a cambiar.
