Custodia compartida es un derecho de ambos progenitores que en México, a diferencia de tantos países, sigue sin entenderse como tal, explicó Martin Medina Sonda y al mismo tiempo avisó sobre el peligro de que este derecho se entienda como un capricho.
“La crianza de los hijos es una responsabilidad que ambos progenitores ejercen desde el momento en que los hijos nazcan. Pero no termina con el divorcio. No es una cosa de competición entre los progenitores, el quien se va llevar la custodia y quien la perderá. Es una obligación que debe seguir compartida aun terminados los lazos matrimoniales. De cualquier otra forma, siempre habrá los mismos afectados, que son los hijos”, avisa este abogado y padre de tres hijos por cuya custodia sigue luchando después de varios años de proceso judicial.
Durante la mesa redonda organizada por Padres para la custodia, Martin Medina Sonda expuso las evidencias que sitúan a México en la cola de los países que buscan una mayor involucración emocional y educativa de ambos progenitores una vez acordado el divorcio.
La realidad sigue siendo que en muchos casos se expulsa al progenitor del ambiente familiar, con falsas acusaciones de maltrato o abuso sexual. “Por la complejidad del fenómeno es una necesidad unir esfuerzos de las diferentes instituciones y organizaciones nacionales e internacionales que permita tener una cobertura más amplia de las necesidades de los niños que necesitan de ambos progenitores para tener una infancia sana y equilibrada”.
Esto requiere un mayor avance en la materia de la custodia compartida, algo por los que Martin Medina Sonda aboga desde hace ya varios años e invita a todas las instituciones y profesionales a tomar medida para que el derecho de crianza de los hijos esté garantizado a pesar de la separación matrimonial.