PINCHAZOS EN LA REGENERACIÓN: UNO BASTA El microondas es un electrodoméstico de uso común desde hace décadas. Se supone que a estas alturas, todos deberíamos saber usarlo, pero por razones históricas, a día de hoy, esto aún no es así.
Para regenerar un producto envasado en el microondas, la forma correcta es agujereando UNA vez el film de tapa con el tenedor para liberar la presión que genera el aire calentado dentro del envase y que no reviente el film. Basta con una perforación para la mayor parte de las regeneraciones (que duran entre treinta segundos y cinco minutos en el microondas, dependiendo del tipo de comida y cantidad, del material del envase y de la potencia del microondas).
Y sin embargo... tanta gente sigue haciendo TRES, CUATRO y HASTA CINCO perforaciones con el tenedor de cuatro puntas. ¿Resultado? Hay una mayor cantidad de humedad del plato que se escapa por esos agujeros, y la comida se reseca en superficie.
En cambio, con una única perforación con el tenedor, basta para liberar la presión del aire, sin que todo el aire se escape, con lo que la humedad evaporada por el calor se mantiene dentro del envase, acelerando el calentamiento de la comida y disminuyendo la pérdida de humedad. La causa de esta mala praxis está en la época de los primeros platos preparados ideados para ser calentados al microondas. Eran otros tiempos, y tanto los materiales de film y de envase, como los aparatos microondas, como los precocinados, han evolucionado, así que hemos de adaptar nuestras prácticas a esas mejoras... y a partir de ahora, conviene hacer solo una perforación para mejorar la calidad final del plato.