Las delicatessen son vistas como un artículo elitista, cuando en realidad su característica es la calidad. Pero no por ello delicatessen es sinónimo de producto caro. Su relación calidad precio y su versatilidad como regalo gourmet la convierten en un bien de consumo muy interesante.
Delicatessen es una palabra que la gran mayoría de personas relaciona con lujo y exclusividad. Esta interpretación arrastra cierta connotación excluyente, alejando a la delicatessen de su verdadera esencia: la calidad. En España esta mitificación del concepto contribuye a que su evolución en el mercado sea mucho más lenta de lo que debería ser en relación con el estándar del nivel de vida. Desde Deliteca, tienda gourmet online especializada en la venta de delicatessen y bebidas selectas, señalan que detrás de este tipo de productos hay un especial cuidado en la selección de una materia prima de calidad, un proceso de elaboración tradicional y un cuidado en el diseño del envase y embalaje. Todos estos factores implican necesariamente que una verdadera delicatesen nunca podrá encontrarse en un lineal de supermercado, pero ni mucho menos supone que su consumo sea algo elitista o restrictivo. Como ejemplo podría estar un aceite de oliva virgen extra de autor o un vinagre de pulpa de frutas, artículos en los que se encuentra una extraordinaria calidad por menos de 10 euros. Si comparamos la poca cantidad que se precisa en cada uso con el gran aporte de sabor y aroma que hacen a la comida, sin duda su relación calidad precio lo convierten en un producto muy competitivo. Además, su aplicación va más allá de la mera adquisición para su consumo. Gracias a la distinción de su calidad como producto junto con el esmero en su diseño y presentación las delicatessen resultan ideales como regalo. En este sentido en Deliteca apuntan que en los países del norte de Europa está muy extendido el concepto del regalo gourmet. En una sociedad en la que todo el mundo tiene de todo y en la que en ocasiones ante un compromiso resulta un verdadero quebradero de cabeza decidir que regalar, las delicatessen se erigen como una extraordinaria alternativa. El abanico de posibilidades que ofrece el ámbito gourmet es muy amplio. Confituras, vinos, licores, tés de importación, pastas italianas… Siempre hay algo con lo que acertar. Se puede recurrir a los estuches ya existentes o dar rienda suelta a la imaginación y confeccionar uno mismo un set completamente ajustado a sus necesidades personales. Sabores exquisitos, mimada presentación, elegancia, distinción. Las más delicadas vituallas rendidas al placer de los sentidos. Un regalo con el que acertar seguro… Delicatessen, la alternativa perfecta.