Emprender no es una tarea fácil, pero es algo necesario que, de una manera u otra, todos deben hacer en algún momento de la vida

Ser un emprendedor significa plantarse frente a un reto laboral (en la mayoría de los casos), surcar el camino y conseguir el éxito. Sin duda, ser un emprendedor es la clave para conquistar el área laboral; las empresas buscan personas con iniciativa, que sean líderes, que sepan manejar las dificultades y retos que se presenten. Esto es en sí la esencia de ser un emprendedor, mucho más que ser solo un profesional. Existen algunas herramientas para fomentar el emprendimiento que se deben tomar en cuenta para poder dominar efectivamente esta tarea.

Antes de comenzar a describir algunas herramientas analíticas, hay que adentrarse un poco en algunos factores de la personalidad del emprendedor que son básicos. Para empezar, el primer paso será conocerse a sí mismo como emprendedor. Realizar un análisis introspectivo sobre las fortalezas y debilidades propias. Es necesario tener en cuenta que la vocación es esencial para alcanzar el éxito, ya que, por más esfuerzos y estudios que se hagan, sin vocación el trabajo será tedioso y no se podrán cumplir las metas. Es importante tener clara la definición de emprendedor.

Ser un líder es otro aspecto esencial que debe tener un emprendedor. El liderazgo es una de las herramientas más importantes que una persona puede explotar para llevar a una empresa a alcanzar sus metas. Un líder es mucho más que un jefe o una figura de autoridad, es una persona que busca guiar a los empleados a unir fuerzas para lograr sus metas personales con el fin de cumplir una meta común más grande.

Herramientas de análisis y planificación para mejorar el emprendimiento Una vez que se tiene la disposición interna para ser un emprendedor, es bueno conocer algunas herramientas para fomentar el emprendimiento que son útiles para lograr los objetivos. En el sitio de internet Web y Empresas hay varias metodologías y herramientas para el análisis situacional del emprendimiento.

La matriz FODA es una herramienta analítica que se puede ponerse en práctica en la mayoría de las situaciones. Esta dicta un acróstico de factores positivos, oportunidades, fortalezas, debilidades y factores negativos. La finalidad de este análisis es conocer empresa a profundidad para así poder trabajar en reforzar los aspectos positivos ya existentes y mejorar los puntos débiles. Con esto se puede dirigir una estrategia directamente para superar los aspectos negativos y así lograr alcanzar exitosamente las metas.

Utilizar el análisis de fuerzas de Porter también es factible. Este método se trata de una teoría donde se buscan 5 fuerzas que se utilizan para determinar cuánta competencia tiene una empresa en cuanto a la oferta y demanda. Es decir, se busca saber cuánta oportunidad tiene dicha empresa de ser la primera opción para inversores y clientes por medio de una búsqueda interna de fortalezas y debilidades. En caso de que los análisis arrojen resultados no beneficiosos se puede proceder a establecer una estrategia para contraatacar dichos resultados y convertir las debilidades en fortalezas. Las 5 fuerzas a analizar son las siguientes: