Cada vez es más frecuente que se presenten como pruebas en un juzgado evidencias tales como emails, conversaciones de whatsapp, historiales de navegación o interacciones en redes sociales.
En muchos casos de acoso o fraude digital no es sencillo recopilar las pruebas del delito, las cuales son necesarias para presentar ante un juez. Ante esta necesidad de extraer pruebas con validez legal de los dispositivos, surge la informática forense y los peritos informáticos, los cuales extraen las evidencias del delito digital ante un notario, otorgándoles validez legal para poder ser presentadas en un juicio.
Habrá quien piense que exponer emails o conversaciones de whatsapp es tan simple como imprimir una página o hacer un screenshot. Nada más alejado de la realidad, pues como ocurre con cualquier caso que se pretenda presentar ante un juzgado, se debe tener la plena certeza de que la evidencia no ha sido alterada y la información no presenta ningún sesgo, y esto sólo podrá determinarlo un perito informático, mediante un análisis de informática forense, que además debe ser comprensible para jueces y abogados.
Ante el aumento de casos de fraude, chantaje o acoso digital, la demanda de peritos informáticos no para de crecer. “Un juez no tiene por qué saber de sectores dañados ni un abogado de cómo restablecer archivos borrados, su trabajo como profesionales es interpretar la ley, de igual forma, el nuestro es encontrar los datos faltantes en una investigación y ayudar a presentar la evidencia de la forma más clara y objetiva posible.” explica el C.L. del equipo de informática forense de Guardion.
Hasta el más mínimo detalle puede ser definitivo en un caso de filtración o robo de información corporativa o institucional, algo tan simple como saber qué pendrives fueron introducidos en el ordenador, puede ser determinante para saber quién pudo haber extraído información de un ordenador sin permiso. “Nuestras acciones en el mundo digital dejan rastro, no por eliminar un archivo éste realmente desaparece de la memoria, lo mismo pasa con nuestra bandeja de correo electrónico, historiales de navegación o interacciones en chats corporativos, entre muchos otros elementos que usualmente pasamos por alto.” Comenta C.L.
Hoy en día nadie desestima el valor de proteger y resguardar información sensible, ya sea a nivel particular, empresarial o gubernamental. Pero no existe un sistema de defensa perfecto y en el caso de que algún siniestro llegue a los juzgados, resulta crucial contar con compañías como Guardion, que tienen entre sus filas destacados expertos en informática forense.