En el primer trimestre de 2021 los precios de todos los mercados eléctricos europeos aumentaron. El incremento de la demanda provocado por la bajada de las temperaturas, en parte por el efecto de la borrasca Filomena, fue una de las causas del aumento. Otros factores que favorecieron este comportamiento fueron la subida de precios del gas y el CO2. Este último alcanzó un precio de cierre récord cercano a los 43 €/t. La producción solar aumentó en general y la eólica en la península ibérica e Italia