En lo que va de 2024, el puerto ha recibido 104.000 pasajeros de cruceros. Hoy en día, es uno de los principales polos de atracción de cruceros de grandes dimensiones procedentes de múltiples destinos internacionales.
El proyecto de reconversión, que afectó a más de 84 hectáreas de la zona portuaria, se diseñó especialmente para integrar el puerto en el paisaje de la ciudad y minimizar el impacto ambiental. Desde el desarrollo de este proyecto y su participación activa en el proyecto ECOCRUISING FU_TOUR, el puerto de la ciudad de Tánger se ha convertido en un referente internacional por su compromiso con el turismo sostenible. Esto ha sido posible gracias a las sinergias y consensos a los que han llegado los agentes del sector público y privado para avanzar juntos hacia un modelo turístico que favorezca el desarrollo económico de la ciudad y sea respetuoso con el entorno natural y cultural.
Uno de los objetivos principales de este ambicioso proyecto era contribuir a la economía local y a la creación de empleo, fomentando prácticas sostenibles. Para lograr este objetivo, se han lanzado varias iniciativas a partir de la renovación de la zona portuaria: inversiones en infraestructuras y logística para conectar este puerto con los principales puertos de África y Europa, potenciando su conectividad regional, nacional e internacional, diversificación del turismo fomentando la oferta cultural y de eventos, implantación de nuevas tecnologías para mejorar la eficiencia y la competitividad, oferta de los mejores servicios a las compañías de cruceros, promoción de la historia y la cultura de la ciudad, asegurando la integración y el desarrollo del barrio histórico de la medina y su litoral turístico.
Además, la nueva terminal de pasajeros del puerto de la ciudad de Tánger se ha diseñado cuidadosamente para acoger tanto cruceros como ferries rápidos. Para dar cabida a los cruceros más grandes, se han creado tres nuevos amarradores específicamente diseñados para los cruceros de mayores dimensiones, teniendo el amarre más extenso unos 360 metros de longitud. Esta nueva terminal ha contribuido también a mejorar la experiencia de los pasajeros de cruceros debido, sobre todo, a sus modernas instalaciones, a sus medidas de seguridad y a la mayor capacidad para acoger cruceros de mayores dimensiones, lo que ha consolidado a Tánger como destino destacado en el circuito de cruceros del Mediterráneo.
Inmersión en la cultura marroquí a través de su gastronomía
"Traer el mar a la ciudad" y "unir el puerto con la ciudad" fueron las dos ideas principales de este proyecto que ha posicionado a Tánger como uno de los principales destinos turísticos, culturales y de eventos del Mediterráneo. Prueba de ello es la exitosa iniciativa Blue Door Cuisine, una experiencia culinaria que permite a los turistas involucrarse en la cultura marroquí a través de su gastronomía. Se trata de talleres culinarios que se realizan en un histórico piso art-deco situado entre el puerto de la ciudad y el Gran Socco de la ciudad vieja. La peculiaridad de la iniciativa radica en que son los talleres los imparten los propios ciudadanos de Tánger, lo que convierte a la comunidad local en uno de los principales agentes en los que impacta el turismo. Además, la iniciativa culinaria convierte a esta comunidad en un atractivo más del destino y un actor clave en el desarrollo económico y sostenible de la ciudad. La experiencia incluye la famosa ceremonia del té marroquí, la elaboración del pan y una visita guiada al horno público y a la tienda de especias.
Esta iniciativa respetuosa con el medio ambiente que, sin duda, ha contribuido al éxito de Tánger como destino de cruceros, se basa en diferentes principios de ecoturismo:
- Productos locales: Esta experiencia culinaria se fundamenta en las compras de proximidad y en el consumo de productos que han sido cultivados, producidos y manufacturados en el país, lo que contribuye a reducir la huella de carbono.
- Proximidad con el centro de la ciudad: la cercanía del puerto con la ciudad favorece los desplazamientos a pie, lo que también minimiza el impacto medioambiental.
- Impacto social: Implicación de las mujeres locales en la preparación de los platos y en la elaboración del pan y del té.
- Impacto económico: La iniciativa favorece la creación de empleo, pues los ciudadanos implicados tienen salarios y beneficios.
- Conciencia de reciclaje: Sobre el desperdicio de alimentos y el reciclaje de plásticos.
- Promoción de la cultura y la historia de la ciudad: Promoción de los artesanos y comercios locales. La proximidad de la medina es una gran oportunidad para fomentar el turismo cultural.
- Compromiso con la comunidad: Compromiso con el voluntariado a través de ONG locales.
El ambicioso proyecto de la transformación de Tánger en una ‘smart city’
La reconversión del puerto urbano de Tánger no es la única iniciativa para hacer de esta ciudad un destino de economía verde y turismo sostenible. En 2022, las autoridades marroquíes firmaron un acuerdo para dar luz verde al ambicioso proyecto conocido como "Cité Mohamed VI Tanger Tech" en la región de Tánger- Tetuán – Al Hoceima. Esta infraestructura estará finalizada en 2033 y ocupará una superficie de 2.167 hectáreas. Según las autoridades marroquíes, también se construirá una zona de aceleración industrial (ZAI) con una superficie de 947 hectáreas que albergará numerosas infraestructuras como complejos residenciales, turísticos y de ocio. El proyecto también permitirá la transformación digital de la ciudad de Tánger a través de tecnologías de vanguardia con una superficie de 1.220 hectáreas destinadas al desarrollo de una ciudad inteligente. Este proyecto convertirá Marruecos y la ciudad de Tánger en un hub estratégico entre Europa y África, apoyando la estrategia de la industria nacional para revolucionar el panorama económico marroquí.