El nuevo libro de Tomás Crespo, editado por California Editorial, ya está disponible en librerías
El autor barcelonés, especializado en música, explica que los lectores de Nirvana. Nevermind. La última revolución recordarán que se había dejado al trío formado por Kurt Cobain, Krist Novoselic y Dave Grohl iniciando el año 1992 de la manera más sorprendente de todas las posibles: con su nuevo disco, desbancando del número 1 del Billboard al Dangerous de Michael Jackson. Es decir, que una banda totalmente desconocida fuera de la ciudad de Seattle hasta poco tiempo antes, empezaba a convertirse en el mainstream que poco tiempo antes detestaban. ¿O más bien era el mainstream el que se había desplazado hacia ellos?
La gran pregunta era: ¿qué hacer ahora? ¿Qué pasos debía dar una banda underground que, tras fichar por una multinacional -Geffen-, había conseguido un éxito planetario con el que apenas era su segundo disco? Lo primero fue salir de gira mundial; y más adelante, lanzar el disco Incesticide, que incluía principalmente canciones ya publicadas antes en singles, EPs u otros recopilatorios.
Pero eso no era suficiente para calmar la sed de nuevos temas de Nirvana. Conscientes de ello, y tras unas maquetas y jams grabadas en Brasil, el grupo regresó a Estados Unidos con algunas canciones nuevas ya acabadas, y otras aún por rematar, pero con la idea de encerrarse a grabar, por fin, el disco que iba a suceder a Nevermind. El nuevo LP de Nirvana. Ese que, tras muchas idas y venidas, acabaría llamándose In Utero.
El libro de Crespo, Nirvana In Utero, ya está disponible en las librerías de todo el país. Sobre el autor Tomás Crespo (Annecy, Francia, 1978) es licenciado en Comunicación Audiovisual y Periodismo, amante de las letras, el cine y la música, ejerce el periodismo freelance y colabora con la agencia edeon desde hace una década. En febrero de 1994, con apenas quince años, asistió al único concierto que Nirvana ofreció en Barcelona. Menos de dos meses después, Kurt Cobain se voló la cabeza. Y treinta años después, Nirvana. In Utero. El sonido que Kurt Cobain oía en su cabeza analiza el que inevitablemente quedó como el último disco del grupo.