img

A la mayoría de las personas les gustaría tener unos dientes bien alineados, tanto por razones de estética como para evitar maloclusiones, una mala mordida y problemas funcionales de los dientes. Para lograrlo están los profesionales en ortodoncia, un factor clave en el tratamiento. Contar con profesionales cualificados es fundamental para evitar una ortodoncia mal realizada y, por ende, unos resultados desfavorables

La ortodoncia es la especialidad odontológica que se encarga de estudiar, prevenir y corregir las alteraciones del desarrollo, las formas de las arcadas dentarias y la posición de los maxilares, con el fin de restablecer el equilibrio morfológico y funcional de la boca y de la cara, mejorando también la estética facial. Para que los resultados conseguidos sean los adecuados y la dentadura del paciente luzca perfecta y funcione correctamente, es importante realizar un tratamiento profesional y todo comienza con un diagnóstico acertado. El siguiente paso es analizar en profundidad el caso y planificar el tratamiento para conseguir un resultado excelente.

La supervisión exhaustiva del tratamiento es el tercer paso y es muy importante si se desea conseguir los movimientos planificados en el tiempo acordado. Cuando el tratamiento ya se ha llevado a cabo y se han conseguido esos resultados tan esperados y anhelados por el paciente, queda el último paso: la fase de contención. Como se puede observar, realizar un buen tratamiento de ortodoncia no es algo sencillo y se debe dejar en manos de profesionales excelentes, con experiencia en el sector, de lo contrario, es posible que los resultados deseados no se alcancen y sean desfavorables. Clínica Ponce de León, una clínica de ortodoncia con décadas de experiencia, explica qué consecuencias puede haber tras un tratamiento de ortodoncia que no se realiza correctamente.

"Cuando el tratamiento de ortodoncia no se realiza con una planificación adecuada, es la raíz la primera que sufre. En muchas ocasiones se han dado casos de acortamiento de raíces o raíces descubiertas, lo cual, en ambos casos, significa un acortamiento de la longevidad del diente. Si la raíz se acorta o ya no es sostenida por la encía, el diente puede caerse. Estos casos suelen darse cuando los movimientos del diente son demasiado fuertes o cuando no se calibra el movimiento del diente correctamente. Es el caso de las clínicas que prometen unos resultados muy rápidos aplicando unas fuerzas excesivas sobre el diente. En muchas ocasiones más rápido no significa mejor", explica Clínica Ponce.

Otro caso muy común son las exodoncias innecesarias, es decir, extraer dientes por falta de espacio. Tomar esta decisión a la ligera es un error y es fundamental estudiar bien cada caso para que, al terminar el tratamiento, no queden espacios en la boca, según Clínica Ponce de León. Las caries también son un reflejo de un tratamiento mal organizado. Clínica Ponce explica que es fundamental realizar las revisiones adecuadas para evitar que las caries proliferen.