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Las persianas de seguridad son un elemento pasivo de seguridad que es mucho mejor que otros sistemas como son las rejas para ventanas. Se pueden complementar bien con otros sistemas de seguridad para una protección completa contra robos y ocupaciones, según Sistemas 24h

Las persianas de seguridad son conocidas por ser instaladas en las ventanas para lograr un aumento de la seguridad en el hogar. Están fabricadas en aluminio extrusionado y ofrecen una óptima resistencia frente a golpes e intentos de intrusión desde el exterior. Se diferencia de otras persianas en que dispone de un sistema de refuerzo entre las lamas.

Esto hace que el mecanismo que las distingue se bloquee ante un intento de apertura desde el exterior cuando están totalmente bajadas. Por ello, también reciben el nombre de persianas autoblocantes y son las mejores ante un intento de robo o asalto.

Este tipo de protección pasiva de seguridad también es un eficaz aliado contra las amenazas externas, pero ¿por qué se consideran tan seguras?

En primer lugar, debido a su robustez son un método que le pone las cosas difíciles a los criminales. Gracias a la resistencia que tienen pueden soportar intentos forzados de acceso, vandalismo e, incluso, hasta un viento de 200 km/h. Y, aunque no son infalibles, retrasan el intento de acceso el suficiente tiempo para que acudan las autoridades para pillar a los asaltantes, comparado con las persianas convencionales.

Estas persianas, que pueden ser de aluminio y otros materiales resistentes, añaden sistemas antirrobos y puntos de bloqueo que hacen imposible arrancar o retirar del marco de la ventana las persianas una vez que son cerradas.

Aunque, tal vez, su principal atractivo es el poder disuasorio que tienen estas persianas de seguridad. Los delincuentes siempre buscan viviendas que tienen una seguridad deficiente y puntos vulnerables para aplicar sus técnicas de robo. Se estima que el 90% de los asaltantes desecha la idea de robar en una casa que dispone de placa de alarma, puertas blindadas y persianas de seguridad y escogen otros objetivos menos desafiantes.

Así mismo, este tipo de producto que funciona como sistema antirrobo es de muy sencilla instalación, ya que no se necesita realizar grandes modificaciones o cambios en la estructura para colocarlas. Además, se pueden instalar en el mismo espacio que las persianas convencionales, aunque es conveniente contar con la ayuda de un profesional.

Por supuesto, no todas las persianas se pueden considerar de seguridad. Por poner un ejemplo, la normativa EN 12210 considera 5 categorías (de clase 0 a clase 5: C0, C1, C2, C3, C4 y C5) donde se establecen las prestaciones y el nivel de protección que ofrece la persiana según su resistencia ante la carga de viento.

Pero algunas de las dudas de los usuarios sobre si realmente ofrecen seguridad y a qué nivel, la respuesta es que sí proporcionan un buen rendimiento. Incluso algunas aseguradoras abaratan sus seguros si en un hogar existen este tipo de persianas. Mapfre, Línea Directa, Génesis o Pelayo, entre otras, reducen el precio de sus primas si la vivienda dispone de rentables sistemas de seguridad como son las persianas de seguridad, entre otros.

Además de las ventajas señaladas, no se puede olvidar que también proporciona beneficios en cuanto a la privacidad, el aislamiento acústico y otras que mejoran el bienestar en el hogar. 

Igualmente, si la comparamos con otros sistemas de seguridad, el ejemplo más evidente es su comparación con las rejas. Hace un tiempo era habitual ver este último mecanismo de protección en casas bajas y primera planta de hogares, pero con el paso del tiempo, se ha demostrado que no son tan seguras y, además, son un recurso poco estético. Los hogares que todavía hoy utilizan este tipo de estructuras nos recuerdan, en muchas ocasiones, a espacios totalmente cerrados donde no existe la esteticidad ni tampoco garantiza la protección frente a intrusiones externas.

En definitiva, si existe una sensación de falta de seguridad, elegir una persiana de seguridad es una de las mejores opciones. Eso sí, hay que recordar que son un elemento pasivo de protección, por lo que es mejor combinarlo con otros sistemas de seguridad. Y, aunque no son las más baratas del mercado, son una alternativa de seguridad fiable e ideales para proteger los hogares y negocios contra ladrones, allanamientos y ocupaciones.