Relacionar imágenes con palabras, cantar o hablar sobre los libros que se leen, son algunas de las actividades que mejoran la capacidad lectora de los más pequeños, según Smartick Lectura

Un año más, se celebra el Día Internacional del Libro. Una fecha señalada en el calendario que tiene como principal objetivo fomentar el interés por la lectura, sobre todo entre los más jóvenes. Para lograr este propósito, los expertos recomiendan que el hábito de leer se debe potenciar en la infancia. Sin embargo, el porcentaje de padres que leen un libro a sus hijos menores de 6 años ha descendido un 9% en 2020 respecto al año anterior según el Barómetro de hábitos de lectura y compra de libros en España de la Federación de Gremios de Editores de España. Nos obstante, el mismo informe también destaca que la lectura infantil creció casi dos puntos el año marcado por el confinamiento de COVID-19 entre los niños de 6 a 9 años, situándose casi en el 87%.

A pesar de que las familias conocen los beneficios que aporta la lectura a los más pequeños de la casa, por ejemplo, potencia su rendimiento académico, estimula su razonamiento o favorece su concentración; todavía son muchos los que desconocen cómo fomentar en los niños el interés por la lectura. Desde Smartick Lectura, el método español online para aprender a leer y mejorar la compresión lectora para niños de 4 a 14 años, proponen varias actividades para crear el hábito lector desde edades tempranas y mejorar su comprensión lectora:

- Leer en voz alta. Cuando los padres leen cuentos a sus hijos en voz alta generan un vínculo emocional al tiempo que estimulan su atención e imaginación, aumentan sus habilidades expresivas y su dominio del lenguaje. Además, es importante que los padres utilicen la entonación adecuada e incluso gestos para que los niños identifiquen las palabras y las relaciones con objetos.

- Relacionar imágenes con palabras. Una sencilla actividad que consiste en crear fichas con imágenes de animales, plantas u otros objetos, así como otras con sus respectivos nombres. Una vez elaboradas las tarjetas, el pequeño tendrá que leer la palabra para, a continuación, buscar la imagen correspondiente. Este ejercicio, repetido con cierta frecuencia, logrará que los niños aumenten la fluidez lectora.

- Formar palabras con las letras exactas. En este caso, los padres tendrán que crear fichas de letras para formar palabras. Primero deben generar las sílabas y pronunciarlas en voz alta con el objetivo de facilitar a los niños la identificación de la palabra. De este modo, aumentará la concentración de los menores y su curiosidad por descubrir el enigma, al tiempo que aprenden a leer.

- Cantar. Una parte básica del aprendizaje se basa en el refuerzo de la enseñanza mediante el entretenimiento. Una buena forma de amenizar la formación es cantar; el ritmo de las canciones permite a los niños memorizar las palabras, aunque todavía no las entiendan, y con el paso del tiempo asimilarán y ampliarán el vocabulario de la melodía. Otros de los beneficios que aporta este hábito, es que los menores también profundizan en la comprensión del significado de las palabras.

- Subtítulos en las películas. Uno de los mayores beneficios para mejorar la comprensión lectora de los niños es la visión de películas con subtítulos en el mismo idioma. De esta forma se mejora la pronunciación de las palabras además de ampliar su vocabulario y potenciar la comprensión. También se puede potenciar el aprendizaje de otros idiomas con la proyección de las películas en versión original y los correspondientes subtítulos.

- Habla sobre los libros que leen. Los grandes lectores disfrutan hablando sobre los libros que acaban de leer, por eso, para estimular las ansias de lectura de los más pequeños, es importante comentar sobre ellos. Además, puede ser un buen momento para recomendarles otras lecturas.

- Organiza una biblioteca en casa. Está demostrado que el acceso que los niños tengan a los libros incide en su hábito de lectura. Por tanto, una buena manera para lograr que los pequeños lean, consiste en organizar una biblioteca en casa, no hace falta que sean muchos libros, pero sí que estén siempre a su disposición para que se convierta en una llamada a la lectura.

“El Día Internacional del Libro puede ser un buen momento para explorar y conocer nuevos libros y autores que mantenga despierto en los niños su interés por la lectura. Es importante que desde pequeños adquieran hábitos de lectura y disfruten leyendo. De ese modo pasarán de aprender a leer, a leer para aprender, fundamental para su desarrollo cognitivo y adquisición de conocimientos, imprescindibles para un buen rendimiento en el colegio” añaden los fundadores de Smartick Lectura, Javier Arroyo y Daniel González de Vega.