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Las tejerías no dan abasto para atender la demanda que se les ha venido encima a raíz de las tormentas de granizo que este verano

Las tejas se han agotado en Alcañiz, Rubielos de Mora, Castellote, en el Bajo Aragón . Las tejerías no dan abasto para atender la demanda que se les ha venido encima a raíz de las tormentas de granizo que este verano 2017 azotaron estas localidades y que han sido noticia de cabecera en muchos periódicos locales.

Las fuertes granizadas con bolas de pedrisco del tamaño de pelotas de tenis provocaron graves destrozos. El granizo, que alcanzó hasta 7 centímetros de diámetro, rompió las lunas y abolló las carrocerías de multitud de coches; todos los que estaban aparcados en las calles. Las bolas de hielo rompieron miles de tejas y llenaron las cubiertas de goteras, arrancaron ramas, canalones, hojas del arbolado y arrasaron las cosechas.

Los daños han sido cuantiosos. En Gremisa Asistencia de Teruel se han atendido en un tiempo récord más de 500 tejados con multitud de daños en el interior de las viviendas.

Como adelantaron el pasado Mayo, la compañía ya se había preparado: Gremisa Asistencia almacenó tejas de diferentes tipos, los más habituales, materiales aislantes, arneses, toldos de seguridad, limpia canalones y sobre todo membranas asfálticas. Además, se prepararon vehículos, grúas y grupos de actuación inmediata.

"Este tipo de reparaciones siempre es más estresante, ya que los daños producidos afectan a muchos hogares a la vez y todo corre prisa. Estas granizadas aunque solo duraron entorno a los 15 minutos, se hacen muy largas para los afectados, que presencian impotentes como esferas de hielo más grandes que un huevo de gallina, revientan coches, canalones, tejados provocando goteras y demás daños en el interior de las viviendas. En un cuarto de hora, cayeron más de 20 litros de agua por metro cuadrado, la mayor parte de ellos en forma de granizo", comentó Carlos Javier Valenzuela director zona Este y máximo responsable de Teruel y provincia, este año la más afectada.

Desde Gremisa Asistencia se desplazaron numerosas grúas a varias localidades para reparar lo antes posible los tejados afectados. Esta imagen se repitió en las poblaciones afectadas, donde las cuadrillas hacían equilibrios sobre los tejados mientras trabajan a toda prisa para retejar las cubiertas dañadas.

A finales de Agosto, se han terminado con todas las reparaciones realizadas. En poco más de 30 días. Todo un récord.