Si para los adultos resulta difícil decorar una habitación y conseguir que se ajuste a las necesidades más básicas, la idea para decorar la habitación de un bebé es aún más complicada. A continuación se detallan algunos de los consejos esenciales para amueblar y decorar estas habitaciones.
Estética, seguridad y confort, son algunos de los aspectos que se deben tener en cuenta. Decorar el entorno ideal para que el bebé esté cómodo y seguro desde sus primeros días de vida.
Las necesidades del bebé
No es ningún secreto que el entorno doméstico influye en los niños y niñas. Por ello, se debe procurar que la habitación de los más pequeños se adapte a sus necesidades.
Antes de nada, se debe tener en cuenta las necesidades del bebé. Durante los primeros meses, los bebés reaccionan a los sonidos y mueven su cabeza para enterarse de todo lo que sucede a su alrededor. También se llevan las manos a la boca, siguen los objetos con la mirada, agarran cosas y ruedan sobre ellos mismos.
Protector para la cuna
Por ello, se recomienda escoger un protector de cuna que proteja sus brazos y manos de los barrotes y de otros elementos. En este sentido, tampoco se debe añadir ningún accesorio decorativo que pueda resultar peligroso cerca de la cuna. Lo ideal es colocar esos elementos en baldas, estanterías o en armarios, bien lejos de la cuna.
Las cosas del bebé siempre deben estar a mano, preferiblemente cerca de la cuna para no tener desatendido a nuestro hijo en ningún momento. Un armario cerca de la cuna o una cajonera puede ser una gran solución.
Otra premisa importante para decorar su primera habitación es la comodidad. La zona de descanso del bebé debe resultar lo más cómoda posible. Es recomendable poder utilizar muebles con certificado de calidad y diseñados especialmente para cubrir las necesidades de los bebés. Y, por supuesto, escoger ropa de cama en fibras naturales de la más alta calidad.
Zona de ocio y recreo
La zona de recreo y ocio también es muy importante en la habitación del bebé. Móviles, colores y formas estimulan la creatividad y favorecen el desarrollo intelectual de los niños y niñas. Por ello los expertos aconsejan utilizar colores muy contrastados y llamativos, así como objetos que se muevan. Pero eso sí, deben ser juguetes homologados y especialmente recomendados para bebés. Se trata de crear una zona estable, a prueba de tirones para que nuestros hijos desarrollen su imaginación, pero siempre garantizando la máxima seguridad.
En la zona de juegos también se pueden colocar una alfombra que proteja al bebé del frío y duro suelo. Si se utiliza distintas texturas, los niños también desarrollarán el sentido del tacto. Escoge una alfombra o manta de gran tamaño para poder sentarte junto al bebé y asegurase de que es un tejido natural e hipoalergénico. La calidad debe ser la premisa más importante.
Cambiador multifuncional
Un cambiador multifuncional con espacio para almacenar las cosas de los bebés es un mueble muy recomendable para tener en su habitación. Así se tendrá todo en el mismo lugar, al alcance de la mano, y no se invertirá tiempo en otras cosas sin dejar al bebé en ningún momento.
En este sentido, también es recomendable el mobiliario flexible por sus muchas ventajas. Los niños crecen muy rápido, así que, en un abrir y cerrar de ojos, se necesitará muebles nuevos. Por ello es necesario un mobiliario flexible y que se adapte a las necesidades de los niños, conforme vayan creciendo. En comercios especializados se podrá encontrar cunas convertibles en cama que se podrá utilizar durante unos cuantos años.
La seguridad, fundamental
Otro detalle importante que tampoco se debe pasar por alto es la iluminación. Evita la luz directa y opta por luces cálidas, bien distribuidas en toda la habitación. Pinturas no tóxicas, protectores para los enchufes, cubre radiadores, protectores para cajones, puertas y ventanas y muebles con bordes redondos son algunos aspectos que se deben tener muy en cuenta.
El contenido de este comunicado fue publicado originalmente en la página web de Decorablog