Como complemento de esta operación, en la que Repsol ha utilizado una parte de su liquidez, la compañía ha lanzado hoy una nueva emisión de 600 millones de euros en bonos a cinco años (con vencimiento en diciembre de 2020) a un tipo de interés nominal del 2,125%.
La cancelación de los bonos procedentes de Talisman tendrá un efecto positivo, antes de impuestos, superior a los 220 millones de dólares en los resultados de Repsol en el ejercicio 2015, como consecuencia de la diferencia entre el menor valor de la compra y el valor en libros de dichos bonos. Adicionalmente, Repsol obtendrá unos ahorros antes de impuestos de unos 65 millones de dólares anuales por el menor pago de intereses.
El valor actual neto generado con esta operación supera los 1.000 millones de dólares, consecuencia de los ahorros producidos por la desaparición del pago de los intereses a liquidar durante la vida de los bonos y del valor capturado por la recompra de los títulos.