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Los piojos que podemos encontrar en la cabeza, son unos pequeños insectos que viven en la piel que cubre la parte superior de la cabeza y llamada cuero cabelludo. Los piojos pueden esparcirse por el contacto cercano con otras personas. Estos desagradables acompañantes también pueden encontrarse en las cejas y las pestañas. A continuación vamos a intentar resolver las dudas más frecuentes y los falsos mitos que los rodean.

¿Qué precauciones se pueden tomar para evitar la transmisión, y qué debemos saber a cerca de los piojos?

 

1-Evitar el contacto entre las cabezas de los infestados y evitar compartir objetos que tengan contacto con el cabello. 

2- No intercambiar los cepillos, peines, bufandas, gorras y toallas o cualquier otra prenda, si hay riesgo de contagio. También deberán sumergirse en agua hirviendo y se aspirará toda la casa siempre que sea posible. No usar productos para el control de plagas.

3- Debemos vigilar firmemente la cabeza de los afectados. Si confirmamos que no hay piojos y sabemos que en su entorno sí los hay, deben utilizarse repelentes específicos de piojos de venta en farmacias. 

4-Las liendres (huevos de piojo) cuanto más lejos de la raíz están, más probable será que hayan perecido. Es importante distinguir entre caspa y liendres. Éstas últimas son muy difíciles de eliminar con un simple lavado.

5-Las mascotas no pueden transmitir piojos, sólo pueden vivir en la cabeza de las personas. Son parásitos humanos en exclusividad.

6- El piojo adulto tiene una vida de unos 14-16 días más o menos. Las hembras depositan diariamente entre 5 y 8 huevos en el cuero cabelludo.

7- Examinar la base del pelo mechón a mechón con la ayuda de una lendrera. Prestar mucha atención a la zona de la nuca y por detrás de las orejas, los piojos suelen estar en estas zonas. Sacudir enérgicamente el peine en el lavabo o encima de un papel blanco para ver si hay algún piojo.

8- Usar productos pediculicidas de acuerdo a las instrucciones del fabricante y el farmacéutico.

 

 

      Artículo creado por Paula Sanz, veterinaria para los servicios de control de plagas Madrid