Concretamente, según un comunicado del Nuclear Energy Institute (NEI), el 82% de los consultados están de acuerdo con esta afirmación: "Tenemos que aprovechar el uso de todas aquellas fuentes bajas en carbono, como la energía nuclear, la hidráulica y la renovable para producir la electricidad que necesitamos evitando, al mismo tiempo, la emisión de gases de efecto invernadero".
Cuando a los consultados se les muestra una lista de fuentes libres de emisiones y se les pregunta sobre qué tecnología produce el mayor porcentaje de electricidad en Estados Unidos, el 33% considera que es la nuclear, seguida de la hidráulica (30%), la solar (15%), la eólica (9%) y la geotérmica (5%).
"Los estadunidenses reconocen el liderazgo de la energía nuclear como fuente de bajas emisiones y que genera electricidad segura y fiable", ha destacado Ann Bisconti, Presidenta de la firma Bisconti Research encargada de realizar esta encuesta a petición del NEI. De hecho, añade, el 75% de los encuestados consideran que la energía nuclear será o "muy importante" o "bastante importante" para cumplir con las necesidades futuras de electricidad del país.
Estados Unidos tiene 100 reactores nucleares operativos que en 2013 produjeron el 19,44% de la electricidad. En estos momentos construye cinco unidades más. Junto a la construcción de reactores, el país apuesta por la operación a largo plazo de sus centrales operativas. De hecho, 74 de sus 100 reactores tienen concedidas autorizaciones por parte del organismo regulador, la NRC, para 60 años y los titulares de las instalaciones están estudiando solicitar permisos para operar durante 80 años con las máximas garantías de seguridad.