Anunciaban los pisos mediante carteles en tiendas, farolas o escaparates
Detenidos 19 miembros de un clan familiar en Palma de Mallorca que ocupaban viviendas para después alquilarlas
La cuota mensual de arrendamiento oscilaba entre los 250 y 300 euros, que generalmente incluía el consumo de luz y agua, suministrados por enganches ilegales
En los 10 registros domiciliarios se intervinieron dos pistolas, munición, armas blancas, gran número de cerraduras, 9 vehículos de gama alta y 1.300 euros
Se les acusa de pertenencia a organización criminal, estafa, tenencia ilícita de armas, amenazas, coacciones y defraudación de fluido eléctrico
29-mayo-2014.- Agentes de la Policía Nacional han detenido a 19 miembros de un clan familiar en Palma de Mallorca que ocupaban ilegalmente viviendas para alquilarlas posteriormente. Las casas ocupadas eran alquiladas por una cuota mensual de arrendamiento que oscilaba entre los 250 y 300 euros y que generalmente incluía el consumo de luz y agua, suministrados mediante enganches ilegales. Anunciaban los pisos mediante carteles en tiendas, farolas o escaparates. En los 10 registros domiciliarios realizados se han intervenido dos pistolas, munición, armas blancas, gran número de cerraduras, 9 vehículos de gama alta y 1.300 euros.
La investigación comenzó en septiembre del pasado año cuando se tuvo conocimiento de un incremento de casos de ocupaciones ilegales de inmuebles en la ciudad de Palma de Mallorca. Las primeras investigaciones constataron que una organización, compuesta por varios miembros de un clan de etnia gitana conocido como "Los Peludos", se dedicaba a la usurpación de bienes inmuebles con el fin de alquilarlos.
La forma de actuar de este clan era similar en todos los casos, localizaban los inmuebles vacíos y acto seguido derribaban la puerta y colocaban una nueva cerradura.
Alquileres baratos
Tras acondicionar el piso con mobiliario y con los suministros básicos, agua y luz mediante enganches ilegales, se anunciaban mediante carteles en tiendas, farolas, escaparates o por el "boca a boca", ofertando alquileres a bajo precio, entre 250 o 300 euros. Las personas que contactaban con los miembros de la organización solían ser inmigrantes con escasos recursos económicos o desempleados.
La operación, denominada "Kicker", se ha saldado con 19 detenidos, miembros de la organización, acusados de organización criminal, estafa, tenencia ilícita de armas, amenazas, coacciones y defraudación de fluido eléctrico y se han realizado diez registros domiciliarios, nueve de ellos simultáneos, en distintos barrios de Palma de Mallorca.
La investigación, de la que no se descartan nuevas detenciones, ha sido llevaba a cabo por agentes adscritos a la Comisaría del distrito Centro de la Jefatura Superior de las Islas Baleares.